Una joyera vende un anillo de 7.000 euros y una semana después le viene de vuelta: la historia da para telenovela
Una venta de lujo, un cliente de confianza y una madrugada que lo cambió todo.

En la era de TikTok, ya no hace falta que Radio Patio se invente un cotilleo para ponerlo en circulación y, gracias al boca a boca, corra como la pólvora: ahora solo hace falta un vídeo de pocos segundos, música de fondo, subtítulos y una audiencia muchísimo más amplia. Esta semana, sin ir más lejos, la cadena de joyerías Fina García, con tiendas en Barcelona, Madrid y otras ciudades españolas, ha hecho una publicación que tiene todo lo necesario para cerrar la temporada de cualquier telenovela: lujo, una historia de amor y un giro final que haría palidecer a cualquier guionista de una serie de sobremesa.
Todo empezó, claro está, con un cliente. Uno de esos "de toda la vida", de los que entran en las tiendas como Pedro por su casa y no necesitan dar explicaciones de lo que quieren porque en ese establecimiento ya lo saben. Aunque esta vez no escatimó en el precio y cuando llegó el momento de elegir, no lo dudó ni un segundo. "Le dio igual el precio y se llevó uno de los anillos más caros", señalan desde la propia joyería: 7.000 euros que olían a final feliz. "Era su momento. Se iba a comprometer con su novia de 10 años”, explica la joyera en el vídeo de TikTok. Sin embargo, lo que parecía una historia de amor con visos de acabar comiendo perdices, se cerraba siete días después con el regreso de la sortija a la tienda y un final digno de una serie de sobremesa.
Una semana después de comprar el anillo de pedida, justo a la hora en la que estallan las crisis importantes, las tres de la madrugada, en la joyería empezaron a recibir decenas de mensajes que "venían de una sola clienta". "El chat de la web, el WhatsApp, Instagram… todo lleno de mensajes", según cuentan en el vídeo de TikTok. Pero ningún trabajador de la joyería entendía nada de lo que estaba pasando. Bastó con leer lo que ponían para que todas las piezas del puzzle encajaran. "Había pillado a su futuro marido haciendo cosas que no debía en su cama", revela la narradora de la anécdota.
Un anillo, muchas teorías y todavía más sospechas
Obviamente, como ocurre con casi todos los vídeos que se publican en TikTok, la sección de los comentarios no tardó en convertirse en un pequeño corrillo digital, lleno de teorías, suposiciones y juicios sumarísimos. "Bueno, ¿y qué ha pasado? El caballero la estaba engañando, por lo que entendemos, pero ¿y la joyería qué culpa tiene? No me digas que aceptaste el reembolso", escribe un usuario con un tono de abogado del diablo, al que le responde la joyería sin levantar una ceja: “Fue un cambio para acabar todos content@s”.
Pero internet no entiende de matices y ahí empezó el desfile de comentarios. "Qué buena noticia, ahora el anillo de segunda mano estará más barato”, escribió otro con picardía sin esperar a que la joyería Fina García le preguntase la razón de su comentario, lo que sirvió en bandeja la respuesta final: "Joer, ¿te parece poco un anillo maldito?”. Porque sí, porque en cuanto una sortija de compromiso vuelve a la tienda después de una infidelidad, ya no es una joya sino un talismán de mala suerte con certificado.
Entre los comentarios los hay también que han afinado el oído más de la cuenta y, en vez de prestar atención a la historia, se han centrado en el desliz más tonto del vídeo: "¿Se iba a comprometer con su novia de 10 años? Lo han detenido", apunta el comentarista con una pulla que deja en evidencia qué pasa cuando no se usan bien las preposiciones.