El Supremo pone en libertad provisional a Santos Cerdán
Considera que ya no existe riesgo de fuga o destrucción de pruebas tras casi cinco meses en prisión. Eso sí, cree que se han "robustecido los consistentes indicios" que ya pesaban contra él.

El juez del Tribunal Supremo Leopoldo Puente ha decretado este martes la puesta en libertad del exsecretario de Organización del PSOE Santos Cerdán tras haber permanecido casi cinco meses en prisión provisional por su presunto papel principal en la trama de amaño de obra pública del 'caso Koldo'. El Alto Tribunal considera que se ha "seriamente mitigado" el riesgo de fuga o de destrucción de pruebas. En su lugar, le impone como medidas cautelares comparecencias quincenales en el juzgado y prohibición de salida del territorio nacional con retirada del pasaporte, las mismas que pesan contra el exministro José Luis Ábalos y su exasesor Koldo García.
La defensa de Santos Cerdán lleva mucho tiempo pidiendo su libertad, situación que disfrutan por ahora el resto de implicados en la trama. Para mantener la prisión provisional, la Ley de Enjuiciamiento Criminal pide que exista "riesgo de fuga, o de destrucción u ocultación de pruebas, o de reiteración delictiva".
El juez instructor consideraba hasta ahora que había “un riesgo cierto” de que, si Cerdán salía en libertad, el exdirigente socialista podría ocultar, destruir o alterar pruebas relevantes. "Solo la persona que, según parece resultar, se encargaba de realizar las gestiones oportunas con los pagadores (los empresarios involucrados) estaría en la mejor disposición para conocer también este último extremo, en el caso de que así hubiera tenido lugar, y correlativamente de ocultar, alterar o hacer desaparecer las pruebas que pudieran existir al respecto, así como acerca del modo en que se articulaban los ilícitos pagos", señaló Puente en el auto en el que decretaba prisión para Cerdán el pasado 30 de junio.
En cambio, respecto a Ábalos y Koldo García, el instructor entendía que la investigación ya estaba suficientemente avanzada y que no existía peligro de destrucción de pruebas, aunque sí un riesgo de fuga "creciente". Sin embargo, ese riesgo no lo veía de la “intensidad” necesaria como para acordar una medida tan restrictiva como es la privación de libertad.
Ahora, sin embargo, el juez instructor ha decidido que Cerdán disfrute de la misma situación que el resto de implicados en la trama, aunque también destaca que se han "robustecido los consistentes indicios" que ya pesaban contra él. "El resultado de la investigación practicada no solo no ha diluido los consistentes indicios de criminalidad con los que ya se contaba en la causa, sino que, muy al contrario, los ha reforzado en buena medida y abierto nuevas líneas de investigación", asegura en el auto.
