Por qué 'El método Williams' debe ganar el Oscar a la Mejor película y por qué no

Por qué 'El método Williams' debe ganar el Oscar a la Mejor película y por qué no

¿Llegó la hora de Will Smith?

Demi Singleton, Will Smith y Saniyya Sidney en 'El método Williams'.Warner Bros

A la tercera va la vencida, podría pensar Will Smith, protagonista de El método Williams, nominado a Mejor actor en los Oscar. Aunque lo tiene tan difícil como el film para ganar la estatuilla a Mejor película, nunca hay que dar nada por sentado: ya desbancó en los SAG Awards a Benedict Cumberbatch, Javier Bardem, Andrew Garfield y Denzel Washington.

También es cierto que los biopics siempre se miran con gran respeto, y hasta veneración, desde la Academia. Asimismo, King Richard (Reinaldo Marcus Green) relata el incansable esfuerzo de un personaje no tan conocido —Richard Williams— para que dos personajes muy conocidos —Venus y Serena Williams— se convirtieran en las grandes estrellas del tenis profesional que son a día de hoy. Ahí está la otra baza de la película: su mirada sobre el deporte femenino (y el potencial de los personajes reales en los que se basa).

Las hermanas, que también han participado en la producción ejecutiva del largometraje, han ayudado a desmontar la imagen que en el pasado se tuvo de su padre en Estados Unidos, el de un hombre acusado de querer amontonar dinero, sin importarle la felicidad de sus hijas.

Con poco más de cuatro años, dos niñas afroamericanas que vivían en los suburbios de Los Ángeles comenzaron a ganar torneos. En la actualidad, Serena es una de las dos mujeres que aparece en la lista Forbes de los 50 atletas mejor pagados de 2021. De los 39 títulos de Grand Slam que ha ganado—el récord de la Era Abierta, es decir, desde que el tenis se profesionalizó—, 14 han sido dobles femeninos, todos junto a su hermana Venus. Por su parte, esta fue la primera tenista negra en ser número uno de la WTA (2002).

  Una imagen de 'El método Williams'.Warner Bros

Por qué SÍ debe ganar el Oscar a Mejor película

1. Muestra no solo a dos chicas, sino a dos niñas abriendo paso a las mujeres negras en el mundo del tenis, un deporte de blancos, tal y como se dice en la película.

2. Asimismo, enseña otra de las caras más duras de esos comienzos: la mención a Jennifer Capriati, una tenista que con 14 años se coló entre las 10 mejores a nivel mundial y que a los 18 años fue arrestada por posesión de drogas. Por suerte, pudo resurgir profesionalmente.

3. Es la visión de un padre de familia numerosa preocupado por alejar de la marginalidad que a él le ha tocado vivir a sus hijas, y para ello coge la furgoneta cuando haga falta para llevarlas a la cancha. La moraleja de la constancia y sus frutos.

4. La ambientación permite al espectador trasladarse a la época en la que se contextualiza la película.

5. Los planos de los partidos son de una realización impecable, especialmente para los amantes del deporte.

6. Para la grata sorpresa del espectador, Reinaldo Marcus Green se ha centrado, por detrás de la figura de Richard Williams, en la de Venus, pese a que Selena está considerada una estrella mayor.

7. El peso actoral de Will Smith (y el de Aunjanue Ellis, nominada a Mejor actriz de reparto) es indiscutible.

8. Heroifica a los personajes, y eso encanta en Hollywood.

9. Vende otra buena causa: ‘hacer justicia’, si se tienen en cuenta las palabras de Will Smith sobre su personaje, del que ha dicho que ha sido un hombre “demonizado”. “Doy las gracias por poder caminar en los zapatos de Richard y tener la oportunidad, no solo de mostrarle al mundo lo incomprendido que era, sino también de iluminar la verdadera situación de esta familia mientras allanaban su propio camino para convertirse en dos de los nombres más icónicos en la historia del deporte”, dijo en un comunicado al conocer su nominación a los SAG.

10. En conjunto, es una película muy pensada para los Oscar.

Por qué NO debe ganar el Oscar a Mejor película

1. Si no te gusta el tenis, puedes estar preparado para que se te haga larga.

2. Las tramas argumentales escasean.

3. El ‘buenismo’ de los personajes es tan excesivo que resulta inverosímil.

4. No es demasiado fiel a la realidad... ni siquiera en la escena del partido contra Arantxa Sánchez Vicario. Pero claro, el guion tiene el beneplácito de la familia Williams.

5. Compite con títulos que lo merecen mucho más.