En Francia piden a sus ciudadanos comprar las luces giratorias que pronto serán obligatorias para circular en España
La nueva normativa afectará a todos los conductores y automóviles que circulen en nuestro país a partir del 1 de enero de 2026.

Este año 2025 será el último en el que la DGT y las autoridades pertinentes permitan a los conductores de los vehículos que circulen por España, utilizar el triángulo de emergencia en caso de avería en la carretera. Así lo decidió la Dirección General de Tráfico durante 2024, y el organismo ha dado un año de margen para que todos los conductores adquieran la alternativa al mítico triángulo de preseñalización: una baliza V-16.
Esta consiste en una luz giratoria que se tendrá que colocar encima del coche en caso de detección forzada en mitad de una carretera debido a un accidente o avería. Pero, ¿por qué han tomado esta decisión?
La respuesta la encontramos en la peligrosidad de los triángulos para los automóviles y motocicletas que vienen por la carretera a gran velocidad. Así, a partir del 1 de enero de 2026, será obligatorio que todos los automóviles cuenten con esta baliza (naranja o amarilla) para señalizar la avería.
Según la DGT, la baliza es más visible y menos peligrosa que el triángulo. La V-16 es capaz de emitir luz de alta intensidad, de forma intermitente y a 360º durante al menos, media hora. Su uso es muy fácil, y tan solo hace falta pegarla en el techo o en una puerta del coche con un imán.
Además, informan de que el lugar más seguro para su ubicación es la guantera, donde aconsejan llevarla siempre. Entre las características que hacen de esta baliza una herramienta clave para detectar accidentes, se encuentra el hecho de que son visibles desde un kilómetro incluso con niebla, además de que es geolocalizable, por lo que la DGT puede recibir la posición exacta del coche una vez sea detectado.
El precio de la baliza oscila entre los 40 y los 50 euros, y se recomienda consultar la web de la DGT para comprobar cuáles son las oficiales y homologadas. En cualquier caso, el precio de este nuevo elemento vial será en cualquier caso, más barato que la multa a la que se expondrán los que no la lleven encima, que se ubican entre los 80 y los 200 euros.