Europa alerta del gran tropiezo de la patata española

España afrontó durante el mes de marzo, uno de los periplos más lluviosos desde que existen registros. La gran cantidad de precipitaciones, como consecuencia del paso de constantes borrascas en nuestro país, han provocado numerosos efectos; muchos de ellos positivos, pero otros tantos, también negativos.

Evidentemente, el 'llenazo' de los embalses, la ausencia de sequía en muchísimas zonas del país -se dice que hasta dentro de varios años-, o la revitalización de lugares y parajes naturales que se encontraban en situación crítica, han sido algunos de los aspectos positivos. Pero también existen consecuencias negativas, casi todas ellas relacionadas con los cultivos.

Y es que, unas lluvias proporcionales y contundentes pueden ser tremendamente buenas en muchísimos casos, pero también puede acarrear consecuencias contrarias. Esto ha pasado en muchos campos de cultivo españoles, y ahora, tras unos días, se comienzan a notar sus efectos.

Uno de los cultivos que más está sufriendo las intensas lluvias de marzo está siendo la patata. Según informan en el portal especializado Freshplaza, citando a Jurgen Duthoo, responsables de Warnez, empresa de patatas belga, dedicada al suministro y venta de patatas, la situación en el mercado español de la patata da síntomas problemáticos debido principalmente a que hay muchos campos de patatas que se han inundado en el sur de España y por consecuencia, se ha retrasado la cosecha.

Según informó Duthoo al medio citado tras consultar con cultivadores de Valladolid y Salamanca, actualmente solo cuentan con un 5% de producto plantado, mientras que en esta época, de media, ya deberían estar en torno al 50%. Lamenta que todo lo que "parecía muy prometedor en febrero, es ahora completamente diferente" debido a las intensas lluvias. 

Y por otro lado, señala que aunque los precios se estabilizaron a finales de febrero e inicios de marzo, nuevamente existe "cierta turbulencia [...] sobre todo debido a los problemas en el sur de Europa".

Y es que, Jurgen destaca que en España y Portugal -dos de los grandes productores de patatas de Europa- ha llovido durante 50 días, mientras que en otros países, como en Bélgica, solo lo hizo entre tres y cuatro días. Esto sin duda, ha supuesto una anomalía y ha condicionado la estabilidad que había semanas atrás.

Por todo esto, y poniéndose en un escenario complicado y pesimista, Jurgen afirma que "existe una alta probabilidad de un vacío en la temporada española", y asegura que "el sur de España seguirá cosechando, pero es probable que la cosecha presente algunos problemas de calidad", mientras que en el norte "llegará más tarde, con gran parte de la cosecha probablemente absorbida por el mercado nacional".