Un hombre deja Suecia y decide mudarse a Portugal para disfrutar de su jubilación: ahorra más de 4.500 euros al mes
Fue una excelente elección financiera.

La gente suele ahorrar para su jubilación con el objetivo de asegurar una buena calidad de vida en esta etapa. Los expertos coinciden en que comenzar a ahorrar desde joven es clave, ya que el dinero tiene más tiempo para crecer. En general, se recomienda destinar entre el 10% y el 15% de los ingresos mensuales a este fin.
Sin embargo, más allá del ahorro, hay que tener en cuenta otros factores como los gastos personales, la inflación y la estabilidad del sistema de pensiones. Por ejemplo, según Rankiator una persona que empiece a ahorrar 150 euros al mes a los 30 años, podría acumular una suma considerable al llegar a la edad de jubilación.
Pero, además del dinero, cada vez más jubilados valoran otros aspectos como el clima, el coste de vida y la tranquilidad a la hora de elegir dónde disfrutar de su retiro. De hecho, eso fue lo que llevó a Alex Trias a dejar su vida en el norte de Europa para mudarse a Portugal.
De Suecia a Portugal
Alex Trias, un abogado sueco jubilado anticipadamente, decidió junto con su esposa dejar atrás su vida laboral y mudarse a Lisboa hace ya una década. La decisión, motivada inicialmente por el deseo de reducir el estrés y disfrutar de una vida más pausada, acabó siendo también una excelente elección financiera.
En Portugal, Trias y su esposa encontraron un ritmo de vida más relajado, con largas cenas, paseos costeros, actividades deportivas y viajes por Europa. Pero además del bienestar emocional, descubrieron que su nueva vida también les permitía ahorrar más de 4.500 euros al mes en comparación con sus gastos en Suecia o en Estados Unidos, donde habían vivido anteriormente.
Estilo de vida más asequible y menos estresante
El menor coste de vida en Portugal ha sido determinante para su estabilidad económica. Según explicó Trias en una entrevista con CNBC, la pareja logra ahorrar cerca de 5.000 dólares mensuales, gracias a una combinación de impuestos más bajos, sanidad más asequible y precios reducidos en vivienda, alimentos y ocio.
En concreto, comparando los gastos en su antigua residencia en Washington, D.C el abogado calcula que ahorran 15.000 dólares al año en impuestos estatales sobre la renta, 25.000 en seguro médico, 14.000 en impuestos a la propiedad y 20.000 en gastos cotidianos.
En total, estos ahorros les permiten vivir cómodamente y seguir haciendo crecer su patrimonio incluso durante la jubilación. “Cuando nos jubilamos, pensábamos que iríamos gastando nuestros ahorros poco a poco, pero nuestro patrimonio neto siguió creciendo”, explicó Trias.
Una jubilación activa y con propósito
"Seguimos la misma estrategia financiera que usábamos cuando trabajábamos: vivimos por debajo de nuestras posibilidades, reinvertimos la diferencia y dejamos que el interés compuesto haga su trabajo. La única diferencia es que ahora, en lugar de salarios, nuestros ingresos provienen de inversiones", detalla.
Más allá del dinero, Trias asegura que la jubilación no se trata solo de dejar de trabajar, sino de redefinir la identidad y encontrar un nuevo propósito. En su caso, se ha dedicado a ayudar a otros a planificar su jubilación y colabora como consultor con una organización sin ánimo de lucro local.
Su esposa, por su parte, participa en actividades comunitarias, clases de cerámica y de holandés. “Con la mentalidad adecuada, la jubilación anticipada puede ser el nuevo punto de partida perfecto”, afirma Trias, quien considera Portugal un país ideal para quienes buscan equilibrio entre calidad de vida y estabilidad económica.
