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Adiós al papel higiénico: encuentran sustancias químicas eternas y piden cambiar el rollo por la pistola

Adiós al papel higiénico: encuentran sustancias químicas eternas y piden cambiar el rollo por la pistola

Una investigación ha detectado la presencia de sustancias perfluroalquiladas y polifluoroalquiladas (PFAS) en este producto. 

Papel higiénico con un fondo rosaGetty Images

Cada año, cada español gasta de media unos 37 rollos de papel higiénico, lo que se traduce en una media de 17 kilogramos de papel higiénico al año, de acuerdo con los datos del medio web 'Shalbaida'. 

Si bien esta cifra es relativamente insignificante en comparación con los datos de embalaje, algunos activistas critican que algunos de los principales productores del mundo contribuyen a la deforestación e incluso vulneran los derechos humanos. 

"El papel tisú representa alrededor del 10% de la producción mundial de productos de papel, por lo que no es tan importante como el embalaje, pero está creciendo", señaló Sergio Baffoni, coordinador senior de campañas de la Red de Papel Ambiental. 

Otra de las cuestiones que preocupa tanto a los activistas como a los consumidores es la presencia de sustancias tóxicas en los rollos de papel higiénico. De hecho, una investigación realizada en 2023 por los investigadores de la Universidad de Florida, detectó, tras analizar 21 marcas de papel higiénico de América del Norte, Europa Occidental, África, América del Sur y América Central, la presencia de PFAS (sustancias perfluoroalquiladas y polifluoroalquiladas).

"Nuestros resultados sugieren que el papel higiénico deben considerarse como una fuente potencialmente importante de PFAS que ingresan a los sistemas de aguas residuales", defendieron. 

Qué son los PFAS

Los PFAS son una familia de sustancias químicas compuesta por cerca de 4.700 compuestos diferentes. Se utilizan para que algunos productos se vuelvan resistentes al agua, al calor, la grasa o las manchas. Los primeros PFAS comenzaron a usarse en la década de 1930 y se utilizaron en muchos procesos industriales y productos en los años 40 y 50. Pueden encontrarse en alimentos, en el agua potable, en productos domésticos comerciales e incluso en organismos vivos, tales como los animales o los seres humanos.

Desde los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades de Estados Unidos defienden que los efectos sobre la salud humana de la exposición de estas sustancias aún son "inciertos" aunque los estudios elaborados en animales indicaron que "pueden afectar a la reproducción, la función tiroidea, el sistema inmunitario y dañar el hígado". 

Algunas alternativas

Para intentar evitar o reducir el uso del papel higiénico existen algunas alternativas como el uso del bidé o del llamado bungum (una pistola de agua que se utiliza para lavarse). 

"Los bidés y los accesorios de inodoro con bidé no solo reducen significativamente la utilización del papel higiénico, sino que también requieren menos agua por empleo que el proceso de fabricación de telas de fibra forestal", explicó el Consejo de Defensa de los Recursos Naturales en su informe anual The Issue with Tissue Scorecard.

"Necesitamos papel higiénico", afirmó por su parte Giovvani De Feo, profesor asociado de ingeniera ambiental y sanitaria en la Universidad de Salerno, quien resaltó que aunque "el papel higiénico fue un invento revolucionario utilizado para resolver el problema de la higiene", también es cierto que "podemos reducir la cantidad de papel higiénico que usamos porque, incluso usando una sola pieza, son tres litros menos de agua que podemos ahorrar".