Dos investigadoras de Países Bajos diseñan un nuevo espéculo vaginal para hacer menos traumáticas las revisiones ginecológicas
"Se ha diseñado pensando en la paciente y no solo en el medico".

Hasta la mujer más valiente se siente bloqueada cuando, durante sus revisiones ginecológicas, el especialista toma en su mano el espéculo para poder observar el cuello uterino durante la exploración y tomar muestras para realizar biopsias. Para ello introduce este utensilio, de metal o de plástico, en la vagina y separa las paredes girando una visagra que abre sus dos espátulas. El resultado es un procedimiento frío, violento, en muchos casos doloroso y arcaico, pues en 150 años no ha sufrido ninguna modificación.
Pero el espéculo tal y como lo conocemos podría tener los días contados gracias al trabajo de Tamara Hoveling, ingeniera de diseño industrial, y Ariadna Izcara Gual, investigadora en diseño médico, que han conseguido desarrollar Lilium, un nuevo instrumento médico que se despliega suavemente. "Nuestro diseño está más centrado en las personas, es más intuitivo y ha sido creado con verdadera atención a mejorar la actual experiencia", dicen sus creadoras de Países Bajos.
Para lograrlo, las diseñadoras recurrieron a una campaña de crowdfunding. "Crear un dispositivo médico requiere más que una buena idea: estamos invirtiendo en materiales seguros, mejoras técnicas, pruebas de usabilidad con profesionales de la salud y cumplimiento de las normativas médicas. Tu apoyo lo hace posible", explicaban. Tales fueron las expectativas que generaron que en menos de dos días habían recaudado los 100.000 euros que necesitaban para continuar el proyecto y esto es un síntoma evidente de la necesidad de un cambio a la hora de abordar problemas de salud femeninos.
"Se ha diseñado pensando en la paciente y no solo en el medico", señala una de sus creadoras. El nuevo espéculo aún se encuentra en una fase inicial y aún se necesitan más pruebas para seleccionar materiales más seguros, certificados de seguridad, ensayos en humanos y conseguir la autorización para su comercialización.
