El inmunólogo Alfredo Corell explica qué cambia este año por la nueva variante de la gripe
El catedrático avisó en 'Más vale tarde': "Hay que tomárselo en serio".

Los casos de gripe se están disparando en España en los últimos días, lo que ha llevado a que desde este miércoles, por ejemplo, en Aragón sea obligatorio el uso de mascarillas en los centros de salud.
¿La incidencia es para preocuparse? El catedrático de Inmunología Alfredo Corell, autor de Inmunidad en forma, ha dado respuesta a esto en Más vale tarde de laSexta.
"Hay que tomárselo muy en serio porque aquí ha habido un cambio de variante", resaltó en el programa. "Estamos acostumbrados a un virus que en los últimos años era, para que la gente me entienda, con estructuras rojas y verdes y hemos producido anticuerpos. Este es el virus habitual en la gripe de cada año, que es la H1N1", explicó mientras mostraba una maqueta casera del virus con una pelota (su detalle particular, con la imagen de Jar Jar Binks, de Star Wars) con chinchetas rojas y verdes clavadas, a las que añadía pinzas de la ropa para mostrar su funcionamiento.
"¿Qué ha pasado este año? Que hay una variante nueva que se llama K y que cambia radicalmente el asunto", prosiguió. Aquí, la pelota que mostraba tenía chinchetas de otros colores y formas, para la que "los anticuerpos que tengo preparados no nos valen". "Nos ha pillado con menos defensas", resumió.
Esto es lo que explica que esté "corriendo tanto", es decir, propagándose tan rápido, y por ello, provocando que ese pico de gripe se adelante. Sin embargo, el catedrático lanzó un mensaje de tranquilidad porque esto no significa que sea más peligrosa. "Ni es más dañina, ni es más letal", puntualizó.
Ante esto, la clave es prevenir, para lo que hay dos maneras: "La higiene de manos y de respiración, que ya nos sabemos de la pandemia, y vacunar, vacunar y vacunar antes que nunca". Por esto, llamó a que, sobre todo las personas de riesgo, como los más mayores, a que se vacunen cuanto antes, que no se esperen.
Como recordó, la vacuna no es perfecta y no supone evitar la gripe al 100%, pero da "un grado de protección suficiente para no pasarlo mal".
