Una actualización médica bautiza a la dieta como el falso culpable del colesterol
Puede haber un motivo genético.

El colesterol es un término que sirve para englobar a las distintas partículas de grasa que hay en el organismo. Lo hay de dos tipos, de baja intensidad (LDL) y de alta (HDL). Y, aunque su presencia es esencial en el cuerpo, puede darse en unos niveles demasiado altos que motiven que alguien padezca hipercolesterolemia.
Esta se da cuando los niveles de colesterol total superan los 200 mg/dl, según la Fundación del Corazón. Los motivos detrás de esta patología, según ha recogido la revista francesa Le Journal des Femmes, pueden ser variados.
Uno de ellos sí es verdad que puede responder a malos hábitos alimentarios, han apuntado, citando al médico vascular de la Asistencia Pública-Hospitales de Marsella, Jean-François Renucci. Ahora bien, este no es el único.
Otra de las razones que puede motivar que un paciente tenga hipercolesterolemia son los genes. Ahora bien, "la forma genética de la hipercolesterolemia sigue siendo rara, representa un caso entre 250", ha esgrimido Renucci, en declaraciones para la publicación francesa.
Se trata de una predisposición genética que contribuye a que aumenten los niveles de colesterol. A veces, ocurre desde edades tan tempranas como el mismo nacimiento, y motiva que las personas que lo sufren tengan mayores riesgos en materia cardiovascular.
Según la Fundación del Corazón, la hipercolesterolemia no presenta signos a nivel físicos y tampoco síntomas. Por lo tanto, para poder realizar un diagnóstico, es preciso hacer un análisis de sangre.