Tener orgasmos puede aliviar los síntomas de la menopausia
Un estudio del Instituto Kinsey y la marca de bienestar sexual Womanizer ha analizado cómo afecta la masturbación a síntomas como el cansancio o el insomnio.

Tener orgasmos es bueno para la salud. Así lo han demostrado diversos estudios a lo largo de los últimos años y lo vuelve a refrendar una investigación elaborada por el Kinsey Institute de la Universidad de Indiana (Estados Unidos) y la marca de bienestar sexual Womanizer. Concretamente, este estudio aborda la relación entre la masturbación y los síntomas de la menopausia, demostrando que puede reducirlos.
Para él se reclutó a dos grupos de mujeres de entre 40 y 75 años en etapa peri o posmenopáusica que se hubieran masturbado en el último mes. Las participantes se dividieron en dos grupos, uno de 66 participantes para la llamada Fase 1 y otro de 12 para la Fase 2.
Durante la primera fase del estudio, se pidió a las mujeres que alternaran semanas de abstinencia con otras semanas de masturbación, tanto con el juguete de estimulación de clítoris Womanizer Next como con su método preferido para medir cómo reaccionaba el cuerpo. La mejora de los síntomas es evidente para muchas de las participantes, que al arrancar la encuesta aseguraron hasta en un 97% haber experimentado al menos un síntoma relacionado con la menopausia.
Los más citados fueron el cansancio y los sudores nocturnos, seguidos de alteraciones del sueño, problemas de concentración o dolor articular. Estos síntomas mejoraron durante las semanas de masturbación del estudio, en las que se recomendó a las participantes hacerlo entre tres y cuatro veces por semana. En total, un 92,9% de las mujeres encuestadas aseguró notar alivio en al menos uno de los síntomas.
Las mejoras más destacadas fueron la reducción del cansancio (con hasta el 48% de las mujeres encuestadas notando esta mejoría), más facilidad para dormir (36%) y para concentrarse (33%), una mejoría del estado de ánimo en general así como dolores de cabeza más leves.
En la segunda fase se incorporó un medidor de frecuencia cardíaca para evaluar la eficacia vagal, es decir, para saber si el nervio vago, que influye en la salud cardiovascular, la respiración o el estrés, funciona correctamente. De nuevo, los síntomas se aliviaron y el tono vagal mejoró durante las semanas de masturbación. “El nervio vago que forma parte del sistema nervioso es el que nos hace estar zen”, apuntó la ginecóloga Miriam Al Adib durante la presentación del informe.
“Se vio una elevación del tono vagal, que tiene sentido que si se produce mejora el cansancio o la concentración y toda la salud general va a mejorar. Biológicamente si tú tienes descargas de oxitocina pues tienes una descarga neurobioquímica que al final es como un analgésico natural. Si tú tienes orgasmos vas a tener descargas de esas sustancias”, explicó la médica sobre algunas de las conclusiones del estudio.
¿Y qué pasa con los sofocos?
Al Adib asegura que lo que hace la investigación es respaldar de manera científica algo que las profesionales han podido ir comprobando en consulta. “Los resultados no me sorprenden nada porque el placer va ligado a la salud y al final tiene una repercusión importante”, añadió la ginecóloga. De hecho, antes de empezar el estudio un 28,4% de las mujeres encuestadas aseguraron utilizar la masturbación para mitigar los síntomas.
Entre esos síntomas que suelen molestar a las mujeres que atraviesan la menopausia están los sofocos que según Al Adib, están relacionados con la "inflamación sistémica de bajo grado". "¿Qué es? Para que nos entendamos, el sistema inmunológico tiene que tener un equilibro entre los factores proinflamatorios y antiinflamatorios. Cuando hay malos hábitos de vida, como mucho estrés o mala alimentación, ese equilibrio se rompe y suben los factores proinflamatorios y se produce lo que llamamos inflamación sistémica de bajo grado, que tiene una repercusión en todos los parámetros de salud como la resistencia a la insulina o las enfermedades cardiometabólicas", explicó la ginecóloga.
"Se ha demostrado que a mayor inflamación sistémica de bajo grado pues más sofocos. Tiene sentido entonces que esta descarga neurobiológica que es el orgasmo baje la inflamación sistémica de bajo grado y salga en la encuesta esta reducción de síntomas", concluyó Al Adib.
La sexualidad no es un deporte, es un placer
A pesar que alcanzar el orgasmo supone más beneficios, durante la investigación se comprobó que tan solo con el momento de la masturbación también puede ser positivo. "También se ven estos beneficios e incluso la reducción de síntomas", comentó la sexóloga Ana Lombardía.
En la encuesta, el 79% de las mujeres aseguró que seguiría la recomendación de masturbarse si se la hiciera un médico, pero Lombardía advierte de que hay que tener en cuenta que el sexo es fundamentalmente placer y hay que tener cuidado a la hora de 'obligar' a las mujeres. "Cuando están en una época en la que no sienten deseo y tú les dices 'mastúrbate tres veces a la semana', pues igual no les apetece. Es una recomendación", recordó la sexóloga.
De hecho Lombardía señala que mientras que el ejercicio físico o algún tipo de suplementación son recomendaciones que se pueden convertir en hábito, en el caso de la masturbación no es lo mismo."No puedes obligar a masturbarte si no te apetece porque eso tiene que venir del deseo, no es un hábito que podamos generar. Sí que es una recomendación que se puede tener y conocer e intentar, que es una de las cosas que pasan con los juguetes, que igual la masturbación es más fácil y apetecible que con tu propia mano, pues a lo mejor te apetece más hacerlo porque sola tardas más o te va a costar más", reflexionó Lombardía.
"La sexualidad no es un hábito ni un deporte, es un placer. Entonces recomendarla a nivel médico, pues es una cosa que hay que tener en cuenta antes de transmitirlo", concluyó la sexóloga.
