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Un elemento de la cocina usado diariamente por muchos españoles suele estar más sucio que la taza del inodoro

Un elemento de la cocina usado diariamente por muchos españoles suele estar más sucio que la taza del inodoro

Limpiarlo es sencillo y rápido, y puede mejorar tanto su rendimiento como el sabor de tu café.

Imagen de archivo de una cafetera italiana.
Imagen de archivo de una cafetera italiana.Getty Images

Una taza de café por la mañana es indispensable para muchos, pero ¿sabías que la cafetera que usas a diario podría estar más sucia que el asiento del inodoro? Un estudio publicado por Mirror ha revelado que, si no se limpian adecuadamente, las cafeteras domésticas se convierten en un verdadero caldo de cultivo para bacterias, moho y sarro, lo que puede ser un riesgo para la salud, especialmente si se usa con regularidad y sin una limpieza profunda.

Los posos de café, aceites y restos de agua pueden acumularse en zonas de difícil acceso, creando un ambiente perfecto para el moho y las bacterias. "El interior de tu cafetera puede convertirse en un caldo de cultivo para gérmenes y moho si no la limpias regularmente", advierte la experta en limpieza Isabella Forgione, a Glamour.

Además, si vives en una zona con agua dura, el sarro también puede hacer su aparición, obstruyendo las tuberías y dañando el electrodoméstico con el tiempo. No solo es un gasto innecesario, sino que esta acumulación de cal puede ser un peligro para tu salud, especialmente si tienes un sistema inmunológico comprometido.

Consejos para mantener la cafetera limpia

Cuidado diario: Después de cada uso, enjuaga las piezas extraíbles, como el depósito de agua, el portafiltro y la bandeja de goteo. Limpia el exterior de la cafetera con un paño húmedo, prestando especial atención a los botones y las asas.

Limpieza profunda semanal: Mezcla partes iguales de agua y vinagre y haz correr un ciclo completo en tu cafetera. Luego, realiza al menos dos ciclos de agua limpia para eliminar el vinagre y cualquier residuo restante.

Limpieza de accesorios: No olvides limpiar el espumador de leche y el cabezal de vapor después de cada uso. Estos componentes son especialmente propensos a las bacterias y a las obstrucciones.

Descalcificación regular: Si tu agua es dura, descalcifica tu cafetera cada 3-6 meses con un producto especializado. Esto evitará la acumulación de cal y asegurará que la máquina funcione correctamente a largo plazo.

Además, existen cápsulas o pastillas de limpieza específicamente diseñadas para las cafeteras automáticas, que eliminan los aceites del café depositados en el interior.

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