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Dos países se disputan la isla más pequeña de África: 500 habitantes y un casino en tierra de nadie

Dos países se disputan la isla más pequeña de África: 500 habitantes y un casino en tierra de nadie

Es la isla habitada más pequeña del continente.

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Es la isla habitada más pequeña del continente.

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Es la isla habitada más pequeña del continente.

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Es la isla habitada más pequeña del continente.

Dos países se disputan la isla más pequeña de África: 500 habitantes y un casino en tierra de nadie

Es la isla habitada más pequeña del continente.

Pescadores en un barco cerca de la isla Migingo en el lago Victoria el 13 de febrero de 2018.Getty Images

Entre las fronteras de Kenia y Uganda, se encuentra la diminuta isla de Migingo rodeada por las aguas del lago Victoria. Este islote mide menos de 2.000 metros cuadrados y alberga a más de 500 personas. Pese a su tamaño reducido, ha sido el centro de una disputa territorial entre los dos países durante más de una década. 

Migingo, antes un trozo de roca apenas visible sobre las aguas, se ha transformado en un concurrido asentamiento de pescadores, con refugios de metal corrugado, un pequeño puerto, varios bares y un casino al aire libre. Es una isla donde la vida diaria gira en torno a la pesca.

este territorio cobró importancia estratégica a principios de los 2000, cuando la escasez de peces en el lago Victoria llevó a un aumento del interés por sus aguas ricas en perca del Nilo, un pez muy valorado en los mercados internacionales.

la guerra más pequeña de África

La disputa comenzó en 2004, cuando Uganda empezó a enviar policías armados a Migingo para cobrar impuestos y proteger a los pescadores de los piratas, lo que generó tensiones con Kenia. Los pescadores kenianos acusaron a las fuerzas ugandesas de hostigamiento, lo que llevó al gobierno keniano a responder con el envío de marines.

Desde entonces, ambos países han intentado resolver la disputa a través de una comisión conjunta, revisando mapas históricos anteriores a la independencia. Sin embargo, hasta ahora, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, y la isla sigue bajo una administración compartida, lo que ha llevado a algunos pescadores locales a referirse a esta situación como “la guerra más pequeña de África”.

Una comunidad unida por la pesca

A pesar de las tensiones, la pesca es el lazo que une a la comunidad de Migingo. Pescadores de toda la región acuden a la isla en busca de suminsitros, compartiendo el espacio en una coexistencia pacífica aunque tensa. Las exportaciones de perca del Nilo, especialmente a la Unión Europea y Asia, han convertido a esta especie en un producto de gran valor, con precios que han aumentado significativamente en los últimos años.

Según el diario Express, Kennedy Ochieng, pescador local, destaca que el precio de la perca del Nilo ha aumentado un 50% en los últimos cinco años, alcanzando más de 300 dólares por kilogramo en los mercados internacionales.

Un futuro incierto

Los pescadores kenianos y los líderes locales han solicitado al gobierno que recurra al tribunal supremo de la ONU para encontrar una solución a este conflicto. Sin embargo, hasta ahora, el comité no ha llegado a ninguna conclusión, por lo que la isla continúa siendo administrada de manera conjunta por las fuerzas de ambos países mientras se espera una resolución definitiva. Mientras Kenia y Uganda continúan buscando una solución definitiva a la disputa territorial, Migingo sigue siendo un punto de encuentro único.

Entre las fronteras de Kenia y Uganda, se encuentra la diminuta isla de Migingo rodeada por las aguas del lago Victoria. Este islote mide menos de 2.000 metros cuadrados y alberga a más de 500 personas. Pese a su tamaño reducido, ha sido el centro de una disputa territorial entre los dos países durante más de una década. 

Migingo, antes un trozo de roca apenas visible sobre las aguas, se ha transformado en un concurrido asentamiento de pescadores, con refugios de metal corrugado, un pequeño puerto, varios bares y un casino al aire libre. Es una isla donde la vida diaria gira en torno a la pesca.

este territorio cobró importancia estratégica a principios de los 2000, cuando la escasez de peces en el lago Victoria llevó a un aumento del interés por sus aguas ricas en perca del Nilo, un pez muy valorado en los mercados internacionales.

la guerra más pequeña de África

La disputa comenzó en 2004, cuando Uganda empezó a enviar policías armados a Migingo para cobrar impuestos y proteger a los pescadores de los piratas, lo que generó tensiones con Kenia. Los pescadores kenianos acusaron a las fuerzas ugandesas de hostigamiento, lo que llevó al gobierno keniano a responder con el envío de marines.

Desde entonces, ambos países han intentado resolver la disputa a través de una comisión conjunta, revisando mapas históricos anteriores a la independencia. Sin embargo, hasta ahora, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, y la isla sigue bajo una administración compartida, lo que ha llevado a algunos pescadores locales a referirse a esta situación como “la guerra más pequeña de África”.

Una comunidad unida por la pesca

A pesar de las tensiones, la pesca es el lazo que une a la comunidad de Migingo. Pescadores de toda la región acuden a la isla en busca de suminsitros, compartiendo el espacio en una coexistencia pacífica aunque tensa. Las exportaciones de perca del Nilo, especialmente a la Unión Europea y Asia, han convertido a esta especie en un producto de gran valor, con precios que han aumentado significativamente en los últimos años.

Según el diario Express, Kennedy Ochieng, pescador local, destaca que el precio de la perca del Nilo ha aumentado un 50% en los últimos cinco años, alcanzando más de 300 dólares por kilogramo en los mercados internacionales.

Un futuro incierto

Los pescadores kenianos y los líderes locales han solicitado al gobierno que recurra al tribunal supremo de la ONU para encontrar una solución a este conflicto. Sin embargo, hasta ahora, el comité no ha llegado a ninguna conclusión, por lo que la isla continúa siendo administrada de manera conjunta por las fuerzas de ambos países mientras se espera una resolución definitiva. Mientras Kenia y Uganda continúan buscando una solución definitiva a la disputa territorial, Migingo sigue siendo un punto de encuentro único.

Entre las fronteras de Kenia y Uganda, se encuentra la diminuta isla de Migingo rodeada por las aguas del lago Victoria. Este islote mide menos de 2.000 metros cuadrados y alberga a más de 500 personas. Pese a su tamaño reducido, ha sido el centro de una disputa territorial entre los dos países durante más de una década. 

Migingo, antes un trozo de roca apenas visible sobre las aguas, se ha transformado en un concurrido asentamiento de pescadores, con refugios de metal corrugado, un pequeño puerto, varios bares y un casino al aire libre. Es una isla donde la vida diaria gira en torno a la pesca.

este territorio cobró importancia estratégica a principios de los 2000, cuando la escasez de peces en el lago Victoria llevó a un aumento del interés por sus aguas ricas en perca del Nilo, un pez muy valorado en los mercados internacionales.

la guerra más pequeña de África

La disputa comenzó en 2004, cuando Uganda empezó a enviar policías armados a Migingo para cobrar impuestos y proteger a los pescadores de los piratas, lo que generó tensiones con Kenia. Los pescadores kenianos acusaron a las fuerzas ugandesas de hostigamiento, lo que llevó al gobierno keniano a responder con el envío de marines.

Desde entonces, ambos países han intentado resolver la disputa a través de una comisión conjunta, revisando mapas históricos anteriores a la independencia. Sin embargo, hasta ahora, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, y la isla sigue bajo una administración compartida, lo que ha llevado a algunos pescadores locales a referirse a esta situación como “la guerra más pequeña de África”.

Una comunidad unida por la pesca

A pesar de las tensiones, la pesca es el lazo que une a la comunidad de Migingo. Pescadores de toda la región acuden a la isla en busca de suminsitros, compartiendo el espacio en una coexistencia pacífica aunque tensa. Las exportaciones de perca del Nilo, especialmente a la Unión Europea y Asia, han convertido a esta especie en un producto de gran valor, con precios que han aumentado significativamente en los últimos años.

Según el diario Express, Kennedy Ochieng, pescador local, destaca que el precio de la perca del Nilo ha aumentado un 50% en los últimos cinco años, alcanzando más de 300 dólares por kilogramo en los mercados internacionales.

Un futuro incierto

Los pescadores kenianos y los líderes locales han solicitado al gobierno que recurra al tribunal supremo de la ONU para encontrar una solución a este conflicto. Sin embargo, hasta ahora, el comité no ha llegado a ninguna conclusión, por lo que la isla continúa siendo administrada de manera conjunta por las fuerzas de ambos países mientras se espera una resolución definitiva. Mientras Kenia y Uganda continúan buscando una solución definitiva a la disputa territorial, Migingo sigue siendo un punto de encuentro único.

Entre las fronteras de Kenia y Uganda, se encuentra la diminuta isla de Migingo rodeada por las aguas del lago Victoria. Este islote mide menos de 2.000 metros cuadrados y alberga a más de 500 personas. Pese a su tamaño reducido, ha sido el centro de una disputa territorial entre los dos países durante más de una década. 

Migingo, antes un trozo de roca apenas visible sobre las aguas, se ha transformado en un concurrido asentamiento de pescadores, con refugios de metal corrugado, un pequeño puerto, varios bares y un casino al aire libre. Es una isla donde la vida diaria gira en torno a la pesca.

este territorio cobró importancia estratégica a principios de los 2000, cuando la escasez de peces en el lago Victoria llevó a un aumento del interés por sus aguas ricas en perca del Nilo, un pez muy valorado en los mercados internacionales.

la guerra más pequeña de África

La disputa comenzó en 2004, cuando Uganda empezó a enviar policías armados a Migingo para cobrar impuestos y proteger a los pescadores de los piratas, lo que generó tensiones con Kenia. Los pescadores kenianos acusaron a las fuerzas ugandesas de hostigamiento, lo que llevó al gobierno keniano a responder con el envío de marines.

Desde entonces, ambos países han intentado resolver la disputa a través de una comisión conjunta, revisando mapas históricos anteriores a la independencia. Sin embargo, hasta ahora, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, y la isla sigue bajo una administración compartida, lo que ha llevado a algunos pescadores locales a referirse a esta situación como “la guerra más pequeña de África”.

Una comunidad unida por la pesca

A pesar de las tensiones, la pesca es el lazo que une a la comunidad de Migingo. Pescadores de toda la región acuden a la isla en busca de suminsitros, compartiendo el espacio en una coexistencia pacífica aunque tensa. Las exportaciones de perca del Nilo, especialmente a la Unión Europea y Asia, han convertido a esta especie en un producto de gran valor, con precios que han aumentado significativamente en los últimos años.

Según el diario Express, Kennedy Ochieng, pescador local, destaca que el precio de la perca del Nilo ha aumentado un 50% en los últimos cinco años, alcanzando más de 300 dólares por kilogramo en los mercados internacionales.

Un futuro incierto

Los pescadores kenianos y los líderes locales han solicitado al gobierno que recurra al tribunal supremo de la ONU para encontrar una solución a este conflicto. Sin embargo, hasta ahora, el comité no ha llegado a ninguna conclusión, por lo que la isla continúa siendo administrada de manera conjunta por las fuerzas de ambos países mientras se espera una resolución definitiva. Mientras Kenia y Uganda continúan buscando una solución definitiva a la disputa territorial, Migingo sigue siendo un punto de encuentro único.

Entre las fronteras de Kenia y Uganda, se encuentra la diminuta isla de Migingo rodeada por las aguas del lago Victoria. Este islote mide menos de 2.000 metros cuadrados y alberga a más de 500 personas. Pese a su tamaño reducido, ha sido el centro de una disputa territorial entre los dos países durante más de una década. 

Migingo, antes un trozo de roca apenas visible sobre las aguas, se ha transformado en un concurrido asentamiento de pescadores, con refugios de metal corrugado, un pequeño puerto, varios bares y un casino al aire libre. Es una isla donde la vida diaria gira en torno a la pesca.

este territorio cobró importancia estratégica a principios de los 2000, cuando la escasez de peces en el lago Victoria llevó a un aumento del interés por sus aguas ricas en perca del Nilo, un pez muy valorado en los mercados internacionales.

la guerra más pequeña de África

La disputa comenzó en 2004, cuando Uganda empezó a enviar policías armados a Migingo para cobrar impuestos y proteger a los pescadores de los piratas, lo que generó tensiones con Kenia. Los pescadores kenianos acusaron a las fuerzas ugandesas de hostigamiento, lo que llevó al gobierno keniano a responder con el envío de marines.

Desde entonces, ambos países han intentado resolver la disputa a través de una comisión conjunta, revisando mapas históricos anteriores a la independencia. Sin embargo, hasta ahora, no se ha alcanzado un acuerdo definitivo, y la isla sigue bajo una administración compartida, lo que ha llevado a algunos pescadores locales a referirse a esta situación como “la guerra más pequeña de África”.

Una comunidad unida por la pesca

A pesar de las tensiones, la pesca es el lazo que une a la comunidad de Migingo. Pescadores de toda la región acuden a la isla en busca de suminsitros, compartiendo el espacio en una coexistencia pacífica aunque tensa. Las exportaciones de perca del Nilo, especialmente a la Unión Europea y Asia, han convertido a esta especie en un producto de gran valor, con precios que han aumentado significativamente en los últimos años.

Según el diario Express, Kennedy Ochieng, pescador local, destaca que el precio de la perca del Nilo ha aumentado un 50% en los últimos cinco años, alcanzando más de 300 dólares por kilogramo en los mercados internacionales.

Un futuro incierto

Los pescadores kenianos y los líderes locales han solicitado al gobierno que recurra al tribunal supremo de la ONU para encontrar una solución a este conflicto. Sin embargo, hasta ahora, el comité no ha llegado a ninguna conclusión, por lo que la isla continúa siendo administrada de manera conjunta por las fuerzas de ambos países mientras se espera una resolución definitiva. Mientras Kenia y Uganda continúan buscando una solución definitiva a la disputa territorial, Migingo sigue siendo un punto de encuentro único.

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Soy redactora en El HuffPost España, donde te cuento las historias más curiosas y te intento ayudar a encontrar esos detalles que marcan la diferencia en la vida cotidiana.

 

Sobre qué temas escribo

Tengo el privilegio de escribir sobre una amplia variedad de temas, con un enfoque que abarca tanto actualidad como estilo de vida. Escribo con la intención de contarte historias que te interesen y ofrecerte información que hagan tu vida un poco más fácil.


Te ayudo a no caer en estafas, te doy consejos de salud y cuidado personal, además de recomendaciones de destinos para tu próximo viaje.


Mis artículos son un surtido de historias curiosas, viajes, cultura, estilo de vida, naturaleza, ¡y mucho más! Mi objetivo es despertar tu curiosidad y acompañarte con lecturas útiles y entretenidas.

  

Mi trayectoria

Soy madrileña, pero con raíces en Castilla-La Mancha. Estudié Periodismo en la Universidad Ceu San Pablo, aunque siempre digo que mi verdadera escuela ha sido El HuffPost, el lugar donde escribí mis primeras líneas como periodista. Empecé como becaria y ahora colaboro en este medio que me ha visto crecer.


Mi pasión por el periodismo nació en la infancia, cuando dibujaba las portadas de los medios deportivos y soñaba con convertirme en una de aquellas reporteras que veía en la televisión.

 


 

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