Los empresarios que apoyaron el Brexit, ahora necesitan mano de obra barata y resulta que la población nativa no necesita estos puestos de trabajo para subsistir.
"La situación está resuelta por ahora", dice Londres, tras la retirada de los pescadores galos de la zona. Pero los cambios del Brexit amenazan con marejada.
Escocia, donde se espera una aplastante victoria independentista, podría plantear de nuevo un referéndum y Londres, la capital, se mantendrá en manos laboristas.
La UE está teniendo dificultades evidentes para asegurar el suministro de vacunas y para implantar una estrategia sanitaria consensuada. Pero también ha hecho cosas bien.