Las mediciones confirman la reducción del dióxido de nitrógeno y las partículas contaminantes, los ecologistas advierten de que los niveles son aún preocupantes.
Habrá quien diga que las medidas para reducir la contaminación son caras, y que estamos en crisis, pero todos los estudios apuntan que es varias veces más económico invertir en prevención que luego hacer frente a los gastos de salud pública que supone una alta contaminación del aire.