"Yo me muero aquí hasta que haya justicia. ¿Por qué no se me ha defendido como Dios manda?", denunciaba desde el banco, frente a su casa, en el que se sentó, ya sin techo.
Reclama al Gobierno que "tome medidas para evitarles posibles daños irreparables" en el caso de una familia con dos hijas de San Martín de la Vega (Madrid).
El propietario de la vivienda, un banco, denunció a su inquilino porque acumulaba siete mensualidades sin pagar. Los servicios sociales habían constatado su precaria situación.
"Pues yo he visto en los juzgados miles de desalojos de este y otros bancos, que no pararon hasta que los jueces empezamos a archivarlos por cláusulas abusivas. No sé si creerlo a él o a mis propios ojos", afirma.