Los icebergs pueden también tener un efecto negativo sobre los ecosistemas marinos. Por ejemplo, en zonas poco profundas pueden llegar a erosionar el fondo marino con la consiguiente desaparición de especies. En ciertas zonas, por ejemplo, se ha observado que la disminución de poblaciones de pingüinos es debida a la acumulación de icebergs en bahías.
En la cortoplacista visión económica que impera en la cultura actual, establecer el valor económico de ecosistemas o procesos involucrados en la naturaleza podría servir para condicionar la toma de decisiones por parte de políticos y/o gestores.
Mi hermano, como millones de personas desconectadas de la naturaleza, pensaba que la pérdida de una especie era algo que preocupaba a los ecologistas más por la belleza de los animales que por su impacto en el planeta. Pero después de una semana en los santuarios más imponentes de este pedazo de la Sierra Madre Oriental, entendió que, más allá de la belleza de las manchas de un felino en su piel, ese animal representa nuestra propia supervivencia.
Hasta hace poco tiempo, las especies raras no se consideraban importantes por sus bajas abundancias y su escasa representatividad en los muestreos. Pero en los últimos años se ha descubierto que las funciones que realizan han pasado desapercibidas para nosotros, y que la presencia o no de esos pocos individuos puede ser de gran importancia para todo el ecosistema.