Ser mamá otra vez, en otra década, en otra historia. En "mi última oportunidad" como tantos me dicen. No me haré la víctima, yo también me lo dije. Me lo dije antes de embarazarme. No soy una gran consumidora de Apocalipsis, como productos industriales, dejo que mis hijos se entretengan jugando con el teléfono, uso vacunas, pero este sí me consumió, el de "mi última oportunidad".