La mutación de la laguna más grande de España
Y uno de los humedales de mayor valor ecológico de Europa.
La laguna de la Janda, la más extensa de España y uno de los humedales de mayor valor ecológico de Europa, mutó hace años en tierras de cultivo, sobre todo algodón pero también aguacate o arroz. Ahora diversas asociaciones han vuelto a alzar la voz para recuperar al menos una parte y que sirva de "motor económico" para una zona en la que hace tiempo que la agricultura dejó de generar empleo, según ha informado el medio La Voz del Sur.
Hasta mediados del siglo XX la laguna ocupaba más de 9.000 hectáreas, 6.000 de las cuales son de dominio público, donde se ubica la comarca de la Janda -que abarca las poblaciones de Conil, Barbate, Vejer, Medina Sidonia, Benalup-Casas Viejas, Paterna de Rivera, Alcalá de los Gazules y Tarifa-, que debe su nombre a la laguna.
Esta englobaba más de 40 kilómetros de agua donde hoy en día apenas hay agua en unas pocas zonas muy localizadas. Los motivos de este cambio, según explica el mismo medio, son varios: se desecó de forma consciente durante el franquismo, la instalación de presas en los ríos que la alimentan —Barbate, Celemín y Almodóvar— y el desagüe que deriva el poco agua que acumula hasta las marismas del Barbate y luego al mar.
Diversas entidades ecologistas -AEMS-Ríos Con Vida, Agaden-Ecologistas en Acción, la Asociación de Amigos de la Laguna de la Janda, Ecologistas en Acción, Fundación Savia, Greenpeace, Iniciativa Natura, Red Andaluza de Nueva Cultura del Agua y SEO/BirdLife- pidieron al Gobierno con motivo del Día de los Humedales el pasado 2 de febrero la creación de una Mesa por la Recuperación Ecológica de la laguna de la Janda. En ella, piden la participación del Estado, la Junta de Andalucía, ayuntamientos de la comarca, regantes y asociaciones conservacionistas.
El domingo, además, convocaron una concentración para presionar y que el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico se decida a crear este instrumento participativo. La meta de estas asociaciones es reducir los regadíos, restaurar humedales ubicados en terreno público y mantener aprovechamientos sostenibles garantizando el empleo, "un acuerdo beneficioso para todos", insisten sus promotores.
Una gran parte del extinto humedal está ocupado ahora por la macrofinca de Las Lomas, de 12.000 hectáreas propiedad de la familia Mora-Figueroa Domecq -una de las más ricas del país-, que pisa los términos municipales de Tarifa, Medina y Vejer.
Este conflicto tiene muchas aristas. Sin embargo, el Plan Estratégico de Humedales 2030 estableció en noviembre de 2022 la necesidad de “restaurar parcialmente antes de 2030 alguno de los humedales más grandes y emblemáticos antaño desaparecidos”, entre los que incluye la Janda. A esto se agarran las entidades ecologistas que ahora luchan por la recuperación de la laguna. La vicepresidenta y ministra para la Transición Energética y Reto Demográfico, Teresa Ribera, se comprometió a recuperar al menos 1.000 hectáreas, aunque no aclaró cómo ni cuándo.