Estas son las claves de la nueva financiación catalana que acordarán Gobierno y Generalitat  

El Gobierno de España y la Generalitat de Cataluña alcanzarán un acuerdo este lunes que supondrá un antes y un después en el sistema autonómico de financiación. Según ha adelantado el diario El País, el nuevo modelo será "singular, federal y generalizable", y buscará dar respuesta a una de las demandas históricas del autogobierno catalán, especialmente promovida por ERC durante las negociaciones de investidura de Salvador Illa que fueron el eje clave de la gobernabilidad del territorio.

Dicha propuesta contempla que la Generalitat asuma progresivamente la gestión, recaudación e inspección de todos los impuestos, comenzando por el IRPF a partir de 2026 que podría alcanzar el 100%. Además, se garantiza el respeto al principio de ordinalidad, es decir, que Cataluña no pierda posición en la distribución de recursos tras su aportación al fondo de solidaridad territorial bajo la lógica de que, quién más aporta, no sea el que menos reciba de los recursos del Estado. 

El modelo ha sido diseñado para encajar en un "marco federal", coordinado con la Agencia Tributaria estatal, pero con un refuerzo claro de la Agencia Tributaria de Cataluña. Este paso se inscribe en lo que El País ha descrito como un "cambio de paradigma", que se aleja de un sistema centralizado y apuesta por una red de agencias tributarias en cooperación, sin jerarquías impuestas y que apostará por la mayor gestión propia de los diferentes territorios que componen el país.

Pese a su carácter singular, el modelo no será exclusivo: podrá ser adoptado por otras comunidades autónomas que así lo soliciten, lo que abre la puerta a una financiación multinivel dentro de un Estado descentralizado. Esta característica es una puerta abierta, una invitación para el resto que tienen ahora en su mano optar por esta nueva financiación que se aprobará este lunes por el ministro de Política Territorial y Memoria Democrática, Ángel Víctor Torres; el delegado del Gobierno en Cataluña, Carlos Prieto, y los consellers de la Presidencia y de Economía y Hacienda, Albert Dalmau y Alícia Romero.

Sin embargo, el acuerdo todavía tiene muchos flecos pendientes. Como señala El País, aún no se han concretado cifras clave, ni se ha detallado cómo se plasmará jurídicamente el modelo, que podría requerir una reforma de la Ley Orgánica de Financiación de las Comunidades Autónomas (LOFCA) y del Estatuto catalán. También quedan por definir las fórmulas del "cupo catalán" y el porcentaje exacto de solidaridad que deberá mantenerse.

En todo caso, el acuerdo que se alcanzará este lunes representa un movimiento estratégico del Gobierno de Pedro Sánchez para blindar la estabilidad parlamentaria y reconducir la cuestión territorial por vías institucionales. Todo ello, la semana después de que el Ejecutivo atravesara uno de sus momentos más críticos desde que el presidente compareciera en el Congreso de los Diputados por los escándalos de corrupción que rodean a Santos Cerdán, José Luis Ábalos y Koldo García por las presuntas mordidas y cobros de comisiones de contratación pública.