Patxi López: "Feijóo está a las órdenes de Ayuso, de Miguel Ángel Rodríguez y, ahora, de Mazón"
El portavoz del PSOE en el Congreso defiende que Europa debe hacerse cargo de su propia seguridad y reitera que un aumento del gasto en defensa no implicará recortes en el Estado del bienestar: "Este es el gobierno de los imposibles".

El portavoz del PSOE en el Congreso, Patxi López, subió este miércoles a la tribuna del Congreso de los Diputados para defender que fortalecer la seguridad no es belicismo, sino que Europa sea independiente. "Y la garantía de que podamos seguir invirtiendo en el Estado del bienestar", añadió. Las palabras del dirigente vasco tuvieron lugar durante la comparecencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a petición propia para defender el aumento del gasto militar de España ante la amenaza de Putin y el cambio de posición de Estados Unidos, que ahora "repliega o socava el multiculturalismo" con Donald Trump en la Casa Blanca.
El objetivo es cumplir con el compromiso del 2% del PIB, o incluso superarlo, ante el recelo de algunos de los socios parlamentarios del Gobierno. Podemos, Bildu, BNG y parcialmente Sumar se oponen a este incremento porque "no equivale a más seguridad" y temen que pueda ir detrimento del gasto social, como ya han anunciado países como Reino Unido o Finlandia. En una entrevista este sábado para El HuffPost, Patxi López defiende, sin embargo, que España es capaz de aumentar el gasto en defensa sin recortar el Estado del bienestar. "Este es el gobierno de los imposibles y lo vamos a hacer", asegura.
En la misma conversación, López confía en el que el PP acabará apoyando dicho incremento porque, en caso contrario, "tendrá que dar cuenta de ello no sólo a España, sino también a la historia". Y sobre el resto de temas de actualidad, como los presupuestos, el portavoz socialista asegura que si por la situación "compleja" que vivimos no fuera posible aprobarlos, "los que se negocian ahora serán los del año que viene".
López, además, también critica las cuentas acordadas por Mazón y Vox para la Comunidad Valenciana al considerar que es el pacto "más antieropeísta" que se ha firmado en nuestro país. Y advierte: "Feijóo ha ligado su futuro a Vox y Mazón. Y el futuro de Mazón va a ser muy breve".
- Pedro Sánchez defendió este jueves en el Congreso aumentar el gasto en defensa, con algunos socios parlamentarios del Ejecutivo en contra de esta decisión. El PP, mientras, abogó por un pacto de Estado pero luego Feijóo les dijo que no contaran con ellos. ¿Entiende usted la postura del líder de la oposición?
- Podemos tener discrepancias con algunos de los partidos que están a la izquierda del PSOE. E incluso con la derecha. Pero la realidad es que vivimos en un mundo en el que, por un lado, tenemos amenazas como las de Putin, que invade países; y por otro lado tenemos una administración norteamericana con Trump a la cabeza que inicia guerras arancelarias o desprecia los derechos humanos cuando hace políticas sobre inmigración. Y, ante esto, los europeos tenemos que tomar una decisión. Y sólo hay una posible: reforzar Europa. Debemos hacernos cargo de nuestra propia seguridad. Y eso implica sí o sí aumentar las inversiones en seguridad. Yo estoy convencido de que cuando el presidente del Gobierno tenga que llevar lo que tenga que llevar al Parlamento, habrá una mayoría que estará en esa misma posición.
- ¿También el PP?
- Incluido el PP... si quiere estar a la altura. ¿Cómo explicaría Feijóo lo contrario a los líderes conservadores europeos? ¿Cómo les va a explicar el pacto del Ventorro, que es el pacto más antieuropeísta que se ha hecho nunca desde España? ¿Cómo lo va a hacer?
- Entonces, usted no descarta que el PP acabe respaldando el aumento del gasto militar...
- No lo sé, porque el PP pierde todo sentido de Estado y nunca está a la altura de las circunstancias cada vez que está en la oposición. Pero el Gobierno y el PSOE van a estar a la altura de lo que requieren los tiempos que vivimos. Porque no estamos hablando de ninguna broma. Están en juego las democracias, los derechos y libertades, la convivencia, la paz en el sentido más amplio, nuestro modelo de civilización... ¿Quién va a estar en contra de esto? Si el PP lo está, tendrá que dar cuenta no sólo a España sino también a la historia.
- ¿Y con Sumar, que también se ha mostrado reacio?
- Lo repito, ya sabemos que a la izquierda del PSOE siempre ha habido gente con unas sensibilidades distintas en estas cuestiones y que son respetables. Pero esta dicotomía que algunos nos plantean sobre que si invertimos en cañones no invertimos en hospitales, no es cierta. Primero porque no se trata de invertir en cañones, sino de invertir en una seguridad que nos permita seguir teniendo hospitales. ¿O no estamos viendo cómo algunas invasiones o agresiones están derribando hospitales? ¿O no estamos viendo cómo algunas agresiones que no son bélicas están cargándose todo lo que es la sanidad pública para sustituirla por la privada, como la motosierra de Milei en Argentina? Ahora nos enfrentamos a lo que antes creíamos que eran distopías encerradas en los libros y en las películas de ciencia ficción: el magnate que utilizaba su fortuna para dominar el mundo. Pues ahora esos magnates tienen nombres y apellidos: Elon Musk. O Donald Trump. Ellos quieren manejar los hilos del mundo y Europa se tendrá que proteger ante esto.
- Sánchez también repite que cualquier aumento del gasto en defensa no irá en detrimento del Estado del bienestar. Sin embargo, en Reino Unido, Starmer ha dicho que lo hará para elevar el de defensa hasta el 2,5% del PIB. Y otros países como Finlandia han seguido el mismo camino. ¿Cómo es posible aumentar el gasto en defensa sin recortar el social?
- Porque este es el gobierno de los imposibles.
- Entonces, ¿es un acto de fe?
- No. Es un acto de realidad. A nosotros se nos dijo que era imposible que creciéramos económicamente y que sostuviéramos a la vez el Estado del bienestar y los servicios públicos, porque eran un derroche. Bueno, pues crecemos cuatro veces más que la media de la UE. Se nos dijo que era imposible aumentar los salarios y crear empleo a la vez porque los empresarios no iban a contratar. Pues hemos aumentado el SMI un 61% y resulta que estamos con récord histórico de trabajadores en este país. Se nos dijo que era imposible subir las pensiones en paralelo a lo que sube el coste de la vida porque el sistema iba a quebrar. Bueno, pues subimos las pensiones para que los pensionistas no pierdan poder adquisitivo y, a la vez, metemos en la hucha de la Seguridad Social más de 5.000 millones al año. Ahora se nos dice que es imposible invertir en seguridad e invertir en políticas sociales... Pues tengo que decir que es absolutamente posible y lo vamos a hacer.
- Sánchez dijo hace unas semanas: "Aquellas cosas que tengan que pasar por el parlamento, lo harán. Y otras cosas que tengan que ver con la gestión, serán aceleradas por el Gobierno". Es decir, no queda claro si se votará o no ese aumento del gasto en Defensa. ¿Una decisión así puede tomarse sin el respaldo de la mayoría de la Cámara?
- El presidente tiene razón. Lo que tenga que pasar por el parlamento, va a pasar. Lo que ocurre es que estamos haciendo debates en el aire. Todavía no está claro de dónde se van a obtener los recursos para financiar esas nuevas inversiones en seguridad. Es lo que ahora mismo se está discutiendo y debatiendo en Europa. ¿O es que alguno sabe ya si esto se va a financiar con fondos europeos, con créditos o si el Banco Europeo de Inversiones va a intervenir para financiar algunas partidas? Dejemos de jugar a esta política de ficción y vayamos a la realidad.

- Hablemos ahora de los los presupuestos. El pasado martes, la ministra portavoz Pilar Alegría, dijo que sería una “pérdida de tiempo” para el Congreso presentarlos si no se cuenta con los apoyos suficientes. Sin embargo, su socio de Gobierno, Sumar, y otros partidos como Podemos, piden llevarlos aunque se pierda la votación. ¿Usted también cree que sería una “pérdida de tiempo”?
- El miércoles lo dijo claramente el presidente. El Gobierno siempre tiene el objetivo de presentar unos Presupuestos que acaben siendo aprobados. Para eso se está dialogando con otras formaciones políticas. Y si por la situación compleja que vivimos no fuera posible aprobarlos, los que se negocian ahora serán los del año que viene. Pero el objetivo del Gobierno es presentarlos para que salgan adelante.
- ¿Y hasta cuándo hay margen para aprobar los de 2025? ¿Hasta mayo? ¿Hasta el verano? ¿Hasta qué momento hay que “sudar la camiseta”, como dice Sánchez?
- La llevamos sudando desde el minuto uno que empezó esta legislatura. Porque resulta que los ciudadanos han decidido que su representación sea la más plural de la historia. Y eso obliga a los que hacemos política a hablar entre nosotros. ¿Cuál es la desgracia que tiene este país? Que hay un partido de la oposición, que es el PP - al que se le suponía que podía tener alguna visión de país o algún sentido de Estado aunque fuera pequeñito - que no apoya las cosas que benefician al conjunto de la ciudadanía. No sé, hablo de la subida de las pensiones, de la subida de los salarios, del incremento de becas, de la gratuidad del transporte o los bonos para que los jóvenes puedan alquilar. El PP ha votado en contra de todo esto.
Por eso, nosotros tenemos que hacer un esfuerzo con el resto de formaciones para sacar estas cosas adelante. No es fácil, pero lo hacemos. Y luego se vanagloria el PP de que ha ganado 100 votaciones en el Congreso. Pues el Gobierno ha ganado 950 y no estamos todo el día poniéndonos chapitas. Nosotros hacemos lo que tenemos que hacer, mientras la única estrategia de Feijóo es votar que 'no' a todo lo que proponga Sánchez. ¡Menuda desgracia para el país!

- Permítame ahora que hablemos del acuerdo de presupuestos que han alcanzado en la Comunidad Valenciana Carlos Mazón y Vox. El presidente valenciano ha asumido muchos de los postulados que defiende Abascal, como el discurso antiinmigración o las críticas al pacto verde. Y todo bajo el aval de Feijóo. ¿Qué opinión le merecen?
- No sólo bajo el aval de Feijóo, sino que él ha pedido que se replique en otros territorios. Recuerdo al portavoz del grupo popular, el señor Tellado, diciendo en su momento que ellos nunca harían presupuestos renunciando a sus principios. Es decir, que dentro de los principios del PP está expulsar a los niños que llegan a nuestro país y devolverlos - como dice eufemísticamente Abascal - a sus padres. Pues no, les devuelven a la guerra, al hambre, a la miseria y a la posibilidad de una muerte por todas estas cuestiones. ¿Estos son los principios del PP? ¿Esa falta brutal de humanismo? Pues eso es inmoral e indecente.
Los principios en los que se basan esos acuerdos son el antieuropeísmo mayor que hemos visto en la historia reciente de España. Porque atacar el pacto verde es atacar uno de los pilares básicos sobre los que se está construyendo Europa. Es atacar la economía circular, atacar la transición energética, atacar la competitividad de nuestra economía... y también atacar el reforzamiento de nuestras infraestructuras hidraúlicas, que también están dentro de ese pacto verde. Lo que pasa es que no saben lo que pactan. Pero el problema es que Mazón ha arrastrado a Feijóo, y Feijóo ha ligado su futuro a Vox y Mazón. Y el futuro de Mazón va a ser muy breve.
- Ahora, Vox está intentando que Azcón en Aragón y López Miras en Murcia también asuman públicamente esos mismos principios. ¿Cree que es consecuencia del lastre que ya es Mazón para el PP, que arrastra a los otros barones a su misma situación, o de un Feijóo que sabe que sólo puede alcanzar la Moncloa pactando con Abascal?
- Mazón lo está haciendo para sobrevivir. El gran problema de este país es Feijóo, que lo ha avalado y ha pedido que se replique. Y no tiene principios, por lo que está demostrando con estos acuerdos. Le da igual todo con tal de parecer que ellos sí tienen presupuestos. Pero, ¿presupuestos a cambio de qué? En el resto de países europeos, los conservadores han puesto una línea roja a la ultraderecha porque saben que es el gran peligro que tenemos, el caballo de Troya que está dentro para destruir la UE. Feijóo ha convertido esa línea roja en una alfombra roja. Y Feijóo es el responsable de que Vox gobierne hoy en Valencia. Y lo quiere extender a Murcia y Aragón. La gran virtud de Feijóo desde que llegó a la política nacional sólo ha sido una: llevar a Vox a los gobiernos. Mientras en toda Europa saben que la extrema derecha no tiene que decidir nada, ellos han hecho que sea Vox quien decida todo en sus comunidades. Pero el responsable de esto no es Mazón, que se está poniendo un salvavidas de diez minutos. Es Feijóo quien lo permite y quien nos ha demostrado que no manda nada. Cada vez que ha mantenido una posición propia, la ha tenido que cambiar porque salían Ayuso y compañía a decir que opinaban lo contrario. Está a las órdenes de Ayuso, de Miguel Ángel Rodríguez y, ahora, de Mazón. Este es el líder de la oposición que tenemos.
- Rufián dijo ayer que Mazón es un tipo “inútil, miserable y mentiroso”. ¿Cómo le describiría usted?
- No me gustan los insultos en política, pero creo que es alguien que ha sido incapaz de asumir la responsabilidad sobre lo que ha sucedido. Alguien que ha engañado y mentido reiteradamente en una de las mayores tragedias que hemos vivido y alguien que no se merece estar en el puesto en el que está.
- ¿Hasta cuándo cree que Feijóo mantendrá a Mazón al frente del PP valenciano y de la Generalitat?
- Mientras le valga para sus intereses particulares, porque no piensa en otra cosa. Feijóo se deja llevar por la frustración de no ser el presidente del Gobierno, cuando él creía que todo estaba puesto para que él lo fuera. Y esa frustración le está llevando a hacer la peor de las políticas que hemos vivido en este país. Él dijo que venía a hacer política para adultos, ¿pero eso significa aporrear los escaños, patear la tarima o gritar sin control en el Congreso? Eso es tan bochornoso como vergonzoso, incluso para los votantes del PP. Y tampoco tiene proyecto. Por eso, cuando el miércoles todos hablábamos de la situación del planeta, de las invasiones, de las agresiones... él empezó a hablar de Ábalos, de que si nos vendíamos a los independentistas... Es una forma de hacer política ridícula.

- Volvamos precisamente al Congreso. Hemos visto en las últimas sesiones de control a ministros muy correctos en sus formas como Diana Morant o Pablo Bustinduy criticar de forma abierta las actitudes de diputados del PP, como Miguel Tellado, que hablan cuando el ministro de turno tiene la palabra. ¿Cuál es el ambiente del Congreso? ¿Qué opinión tiene usted sobre la labor como portavoz del PP que ejerce Tellado?
- En el PP han repartido a todos sus cargos y a todos sus portavoces el manual de comunicación de Goebbels. Esto de deshumanizar y animalizar al adversario viene del manual nazi. Empezaron con 'Perro Sanxe', algo a lo que se le dio la vuelta, y el miércoles pudimos escucharles hablar de ratonera, caniche, galgo... Esto es de manual nazi.
Yo no he tenido en mi vida política más enemigo que ETA. El resto eran adversarios. Pero el PP convierte en enemigo a todo aquel que no sea de su partido. Los socialistas somos el enemigo a batir... y al enemigo se le bate de cualquier manera. Son discursos de odio que el PP traslada con ese manual de comunicación. Y uno de los alumnos aventajados es, claramente, Miguel Tellado.
- ¿Qué relación tiene con el señor Tellado? ¿Hablan asiduamente? ¿Toman café en el Congreso?
- No, y nunca le he visto ni en la cafetería del Congreso ni con nadie. Eso ya dice bastante, ¿no?
- Usted lleva en la política casi toda su vida, unos cuarenta años. ¿Cree que la política con los años ha ido a peor? ¿Hay más crispación, más bulos?
- Lo que ha ido a peor son los políticos, no la política. La política siempre ha sido, es y será imprescindible. La humanidad no ha inventado otra cosa que no sea la política para cambiar las realidades que son injustas y para avanzar. Por eso yo digo a la gente joven que haga política. Porque, si no lo hacen, lo harán otros y, posiblemente, en contra de sus intereses. El problema es que uno cree que promociona más en su partido cuanto más insulte y descalifique a su adversario. Abandonan la razón y creen que porque nos entendamos con otros, estamos traicionado no sé qué cosas. Es todo lo contrario: la política se hace grande si utilizas sus dos grandes herramientas, que son el diálogo y la búsqueda del entendimiento. Lo que tiene valor de verdad es entenderse con el que piensa distinto. Eso sí construye países y sociedades. De hecho, España la hemos construido así.

- ¿Le asusta que, según las encuestas, cada vez más jóvenes asuman el marco ideológico de la ultraderecha? ¿Qué está pasando?
- Pues que está fallando la izquierda. Y seguramente estamos fallando en la comunicación. En entender que hay otros mundos que hablan otros lenguajes, otros idiomas, que se informan en otras redes y que nosotros debiéramos estar ahí.
A mí me frustra mucho cuando me encuentro con un joven que defiende posiciones de extrema derecha. Porque no encuentro ninguna razón lógica para que un joven haya comprado que Franco - al que ni conocen - sea mejor que la democracia que tenemos hoy. Por eso creo que nosotros tenemos que multiplicarnos a la hora de hacer pedagogía sobre la política. La política tiene que ser capaz de formar ciudadanía. Y debiéramos de haber visto cómo la propia educación no llegaba a esas lecciones en las que se hablaba de la dictadura, de la guerra civil, de la República... Y eso ha generado un vacío en mucha gente que ha sido llenado por quienes manipulan y pervierten la historia.
- Tiene usted ya 65 años. Supongo que haber asumido desde 2022 la portavocía del PSOE en el Congreso desgasta mucho. Pero, ¿hay Patxi López para rato?
- Me va la marcha (ríe). Pero queda Patxi López para rato si lo quiere la gente. En mi caso, si lo quieren los militantes o la Ejecutiva. Siempre estoy a disposición de mi partido.
