129 conductores hacen la prueba de alcoholemia, sacan 0,0 y son detenidos al caer en la trampa
La policía inflaba sus estadísticas para incrementar la financiación federal.

Conducir bajo los efectos del alcohol es una de las principales causas de accidentes de tráfico en todo el mundo. Por ello, tomar medidas como poner límites a la velocidad o realizar controles de drogas resultan fundamentales. Sin embargo, cuando estas iniciativas se realizan de forma arbitraria, abusiva o incluso de manera fraudulenta, no sirven como protección, sino que generan una crisis de desconfianza entre la población.
Muestra de ello ha ocurrido en Hawái, Estados Unidos, donde la policía llegó a arrestar, entre 2017 y 2023, hasta a 129 conductores que dieron 0,0 en las pruebas de alcoholemia, según los datos del Departamento de Policía de Honolulú (HPD). ¿El objetivo? Utilizar los arrestos para solicitar fondos federales.
El caso salió a la luz después de que se interpusiera una demanda, en colaboración con la Unión Americana de Libertades Civiles (ACLU), donde alegaron que los agentes empleaban estas detenciones para aumentar sus estadísticas y así conservar o incrementar la financiación federal que se entregaban a programas de contra la conducción en estado de ebriedad.
"Cuando me arrestaron sin beber ni una gota (de alcohol) sentí que mi confianza en la ley y en quienes se supone que nos protegen se desmoronaba", relata Amon Fepuleai, uno de los 129 conductores arrestados de forma arbitraria, que describe su experiencia como "profundamente traumática". Cabe destacar que no se trata de un caso aislado, pues en Tennessee también ocurrió un episodio similar, produciéndose 600 arrestos entre 2017 y 2023, sin que ninguno de los implicados tuviese rastro alguno de alcohol o drogas en sus organismos.