Una abogada especializada en casos de conducción y alcoholemia se niega a hacer el test por su cirugía de labios
La mujer se enfrentaba a una pena de prisión, aunque finalmente ha sido puesta en libertad bajo fianza.

Curioso suceso el que ha tenido lugar en Reino Unido. Una abogada especializada en casos de conducción bajo los efectos del alcohol, Rachel Tansey, se ha negado a hacerse una prueba de alcoholemia argumentando que no podía debido a haberse hecho una cirugía de labios.
"Es como pedirle a alguien que salte después de una abdominoplastia. No puedo hacerlo", subrayó la mujer después de rechazar la prueba para cuantificar su nivel de alcohol en la sangre.
Pero eso no es todo. La policía le ofreció la alternativa de someterse a la prueba de alcohol a través un análisis de sangre, a lo que ella también se negó asegurando que tenía "fobia a las agujas".
La abogada, en calidad de acusada, ha comparecido ante el tribunal de primera instancia de Liverpool. En su declaración, la mujer se retractó de la referencia a "operarse los labios" porque implicaba agujas, a las que dijo tener miedo.
Pese a que la mujer se enfrentaba, según el juez James Hatton, a una posible pena de prisión por "intentar manipular la situación" y por su falta de "credibilidad", finalmente ha sido puesta en libertad bajo fianza.