Arranca el plan de una taberna para ofrecer embutido y vino gratis a los jubilados como parte de una protesta
La iniciativa coincide con la víspera de una fiesta italiana con más de cuatro siglos de historia que este año llega envuelta en polémica.

En Albiate, un pequeño municipio de la Brianza italiana, la víspera de la Sagra di San Fermo ha llegado marcada por un pulso entre el Ayuntamiento y parte de sus vecinos. La decisión de la alcaldesa, Vanessa Gallo, de eliminar el reparto gratuito de salamella, un embutido similar a la longaniza, a los jubilados con el argumento de que resultaba “menos dañino para las coronarias” ha encendido el ánimo de quienes consideran el gesto un símbolo inseparable de la identidad local. Entre ellos, las propietarias de la taberna Rambaldi, que este martes ofrecerán por su cuenta y de manera gratuita un bocadillo con el embutido y un vaso de vino a todos los mayores que se acerquen al local.
“Si el alcalde ha decidido no ofrecer la salamella gratis a los jubilados para la Sagra di San Fermo, nosotras lo haremos”, sostiene Donatella Torraco, que impulsa la iniciativa junto a su socia Nadia Rambaldi y el respaldo de la asociación Territorio in Rete. La propuesta, anunciada ya en junio, no busca únicamente saciar el apetito: “Un pueblo sin memoria y conciencia está destinado a sucumbir”, asegur Torraco, recordando las palabras de Leonardo Sciascia. “Para los ancianos es más saludable una salamella que el aislamiento y la soledad. Siempre haremos lo posible por mantener vivas nuestras tradiciones”.
La Sagra di San Fermo se celebra desde hace 416 años y su programa incluye habitualmente callos y la salamella como reclamos gastronómicos. Torraco considera que su supresión supone “aplanar, si no borrar, nuestra identidad”, y defiende que ambos productos “forman parte de nuestra historia, elementos que recuerdan las raíces campesinas del territorio”. La controversia ha traspasado las fronteras de Albiate y ha atraído a medios y televisiones nacionales, además de críticas del consejero regional de la Liga, Alessandro Corbetta.
Según recuerda Monza Today, la fiesta, que combina ritos religiosos y celebraciones populares, se ha convertido en un escaparate de la cultura brianzola. Este año, sin embargo, el debate sobre lo que es “más saludable” para los mayores ha convertido a un sencillo bocadillo en el centro de una batalla por la memoria y las tradiciones locales.
