Lina, 38 años, holandesa viviendo en España con su hijo, sobre la educación: "Es como si ya tuviera una jornada completa"
La madre ha destacado que "el nivel es mucho más alto que al que estoy acostumbrada en los Países Bajos".
Aunque en España solemos ser bastante críticos con nuestro sistema educativo, algunas personas nacidas en el extranjero que por motivos personales o laborales han traído a sus hijos a estudiar a España tienen una opinión muy diferente.
Es el caso de Lina, una holandesa de 38 años que está viviendo en España con su hijo y que se está quedando sorprendida (para bien) de todo lo que está aprendiendo el menor gracias al sistema educativo español.
En declaraciones al sitio web neerlandés especializado en educación JM Ouders, Lina ha señalado que "el sistema educativo aquí es muy diferente al de los Países Bajos" y ha destacado que "cuando veo todo lo que aprende mi hijo en la escuela primaria aquí en España, a veces me quedo realmente sorprendida".
La madre ha explicado que "mi hijo está ahora en sexto de primaria, equivalente al octavo curso, y lo que aprende es impresionante. Aquí lo saben todo sobre el cuerpo humano: músculos, huesos, nervios, lo que sea. Hace poco también han tenido un curso de reanimación".
"Y luego las matemáticas... fracciones, porcentajes, fórmulas: cosas con las que yo no me enfrenté hasta el instituto. El nivel es mucho más alto que al que estoy acostumbrada en los Países Bajos. ¡A veces él me explica cosas a mí!", ha añadido Lina.
Además, la mujer ha resaltado que el ritmo de aprendizaje es bastante elevado. "Mi hijo tiene al menos dos exámenes y una presentación cada semana. Aquí realmente los preparan para la escuela secundaria. Aprenden a planificar, a asumir responsabilidades y a lidiar con la presión por el rendimiento. A veces me parece bastante duro para un niño de 11 años, pero, por otro lado, lo hace muy independiente", ha expresado la madre.
En cuanto a las jornadas escolares, Lina ha indicado que "son bastante más largas que en los Países Bajos. Las clases empiezan a las 9:00 y duran hasta las 16:30. Comen caliente en la escuela, lo que me parece un sistema muy bueno".
Y el día, en la mayoría de los casos, no acaba al salir de clase. "Muchos niños practican deporte después del colegio: fútbol, baloncesto o kárate. Mi hijo suele llegar a casa sobre las 20:15 después del baloncesto. Y luego todavía tiene que hacer los deberes. Los días son realmente largos en España. A veces pienso: es casi como si ya tuviera una jornada a tiempo completo", ha afirmado la holandesa.