Piden estar preparados para la gran plaga que se avecina en muchas ciudades
"Están invadiendo hogares, tiendas y lugares de trabajo".
El número de ratas en las grandes ciudades ha aumentado drásticamente en los últimos años, y un reciente estudio apunta al cambio climático como el principal responsable. Según investigadores de la Universidad de Richmond, el incremento de estos roedores está directamente relacionado con el aumento de las temperaturas medias, ya que les permite reproducirse y alimentarse durante más tiempo.
El estudio analizó datos de 16 ciudades, basándose en avistamientos públicos e informes de infestación. Los resultados fueron que en 11 de estas ciudades se observó un incremento significativo en el número de ratas.
Washington (+390%), San Francisco (300%), Toronto (+186%) y Nueva York (+162%) encabezan la lista con los mayores aumentos. "Cuando caminas por las calles de Toronto, bajo tus pies, en lo profundo del sistema de alcantarillado, hay un lugar lleno de ratas. Cada vez más, los estamos expulsando a espacios abiertos, ya sea a través de la construcción o las inundaciones, y tienen que ir a algún lugar", señala a The Guardian Alice Sinia, entomóloga principal de Orkin, la compañía de control de plagas más grande del país.
Ciudades como Londres y París quedaron fuera del estudio por falta de datos suficientes. Sin embargo, el investigador principal del estudio, Jonathan Richardson, considera que "no hay razón para pensar que la situación sea diferente en otros lugares".
Un problema de salud pública
Más allá de la correlación con el calentamiento global, el aumento de ratas en entornos urbanos se ha convertido en un desafío para la calidad de vida. En Nueva York, la crisis alcanzó tal magnitud que en 2022 el alcalde, Eric Adams, anunció la búsqueda de un "césar de ratas", un funcionario encargado de liderar la lucha contra la plaga con un sueldo anual de entre 120.000 y 170.000 dólares.
En Toronto, la situación también es alarmante. En 2023, la línea de ayuda municipal recibió 1.600 denuncias por infestaciones, casi el doble que en 2019. "Las ratas están invadiendo hogares, tiendas y lugares de trabajo. Es un problema crítico de calidad de vida", advierte la concejala Alejandra Bravo.
El impacto del clima
El aumento de las temperaturas medias está alterando el equilibrio natural que regulaba la población de ratas. En ciudades como Toronto, los inviernos fríos solían reducir la población de roedores, pero con inviernos más cálidos, estos animales logran sobrevivir y reproducirse en mayor número.
Según los investigadores, la mejor manera de combatir esta crisis es reducir las condiciones que favorecen la proliferación de ratas. Esto incluye medidas como mejorar la gestión de residuos, asegurando que la basura se almacene en contenedores cerrados en lugar de bolsas expuestas.