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Tiran abajo la puerta del centro de los horrores: niños discapacitados encerrados reciben medicamentos caducados

Tiran abajo la puerta del centro de los horrores: niños discapacitados encerrados reciben medicamentos caducados

"Es una situación terriblemente triste".

Adolescente en silla de ruedas leyendo un libro.Getty Images

Conmoción en Rumanía por el escalofriante caso descubierto sobre cuatro centros de atención para niños con discapacidad en la ciudad de Târgu Mureș. Estas residencias operaban sin licencia desde diciembre de 2024 y en condiciones que vulneran gravemente los derechos de 63 menores alojados.

Estas irregularidades, detectadas por el Centro de Recursos Legales (CRJ) y el Consejo de Seguimiento, han encendido la alarma sobre la gestión de la Dirección general de Asistencia Social y Protección Infantil (DGASPC) Mures.

El portavoz de la DGASPC Mureș, Constantin Doru, ha admitido que estos centros operaban sin licencia, justificándolo por un proceso de reorganización que busca transformarlos en viviendas de tipo familiar con capacidad máxima para 12 niños. Sin embargo, lo que más indignación ha causa han sido las condiciones en las que se encontraban los menores.

Condiciones inhumanas

Según informa Digi 24, durante las inspecciones realizadas el 11 de enero de 2025 entre las 5:30 y las 7:00 horas, representantes del Centro de Recursos Legales (CRJ) y del Consejo de Seguimiento detectaron numerosas violaciones de derechos de los menores internados en estos lugares:

  • Niños encerrados. En uno de los centros, 13 menores fueron encontrados en habitaciones con pestillo, medida que el personal justificó por falta de supervisores.
  • Uso de medicamentos caducados. En dos cetros se hallaron medicamentos que habían sido administrados a los menores, pese a que la fecha de caducidad había expirado.
  • Condiciones insalubres. Los investigadores se encontraron con dormitorios compartidos por hasta nueve niños, colchones cubiertos de plástico, camas con tamaños inadecuados y un brote de varicela sin medidas de aislamiento efectivas.
  • Falta de servicios básicos. Los niños no tenían acceso a fisioterapia esencial y actividades de recuperación, a pesar de que son fundamentales para su bienestar.

"En todas las visitas, CRJ observó la misma situación: graves problemas de hacinamiento, falta de higiene, falta de nutrición adecuada, falta de acceso a servicios médicos, falta de actividades y recuperación de los niños, institucionalización forzada", resume la organización.

"Es una situación terriblemente triste porque estamos hablando de 63 niños con discapacidad, de entre 3 y 14 o 18 años", lamenta Georgiana Pascu, gerente del Centro de Recursos Legales". Todos ellos estaban desatendidos y, en algunos momentos, quedaban sin supervisión alguna: "En algunos casos, cuando los cuidadores tomaban descansos, los niños permanecían completamente desatendidos". 

"Creemos que la falta de supervisión de los niños implica una actitud negligente y significa un alto riesgo para la salud y la integridad corporal de los niños. Hacemos hincapié en el hecho de que muchos de los niños han sido diagnosticados con epilepsia y la mayoría de ellos no pueden moverse por sí mismos", critica.

La mujer continúa denunciando que este asunto es tremendamente grave porque los centros se negaron a recibir ayuda para poner solución al problema: "Tratamos de ayudar de manera concreta, llevando médicos especialistas, equipos comprados con fondos privados para que estos niños pudieran ser sacados de la cama y no se tomaron medidas". 

Por último, señala, los niños "fueron retirados del cuidado de sus padres y los padres fueron privados de sus derechos. El director de la DGASPC se convirtió en su representante legal".