El tren de la Expo 92 de Sevilla termina de atracción en un parque temático
Fue uno de los grandes símbolos del evento celebrado en la capital andaluza hace 32 años.
La Expo 92 de Sevilla estuvo íntimamente ligada con el ámbito ferroviario por dos razones: la puesta en circulación del primer tren AVE y la presencia del mítico monorraíl con el que se podía recorrer el recinto.
Respecto al mencionado hito ferroviario, Renfe recuerda en su sitio web que “el 21 de abril del año de la Expo de Sevilla y los Juegos Olímpicos de Barcelona comenzó a rodar el AVE con una flota de 18 trenes que circulaban a 300 km/h por una línea de 471 kilómetros de longitud, que unía Madrid con Sevilla y que atravesaba cinco ciudades”.
Cabe destacar que ese primer viaje del AVE tuvo lugar solo un día después del 20 de abril de 1992, la fecha en la que se inauguró la Exposición Universal de Sevilla.
Por otro lado, ese segundo elemento, el monorraíl, contaba con capacidad para desplazar a 4.200 viajeros por hora. El tren cubría en 20 minutos una distancia 3,1 kilómetros que se dividía en tres paradas.
Desde su dramático naufragio a su peculiar cementerio en Sevilla.
Pese a que ese llamativo convoy fue una de las señas de identidad de la Expo 92 de Sevilla, los seis trenes que conformaban el servicio fueron desmantelados poco después de que finalizara la celebración del evento.
El destino de cada uno de ellos fue dispar, de hecho los vagones centrales de tres de los trenes fueron quemados en el año 2005 en la propia ciudad de Sevilla a raíz de un acto de vandalismo.
Sin embargo, tal y como informa ABC, existe un tren que a día de hoy sigue operativo. El monorraíl continúa cumpliendo la función para la que fue construido, transportar a gente, en el parque de atracciones Europa-Park, situado en el municipio alemán de Rust.
