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Un urólogo pide dejar de hacer esta práctica ‘vergonzosa’ en la ducha

Un urólogo pide dejar de hacer esta práctica ‘vergonzosa’ en la ducha

El calor del agua favorece la relajación muscular y puede aliviar la tensión en los esfínteres urinarios.

Una mujer en la ducha.Getty Images

Orinar en la ducha divide opiniones. Para algunos, es una práctica inofensiva y práctica, mientras que otros la consideran antihigiénica. Aunque pueda parecer un tema menor, la cuestión ha generado debates respaldados incluso por expertos médicos.

Según la profesora Karyn Eilber, uróloga del Cedars-Sinai en Los Ángeles, no existen riesgos significativos asociados a orinar en la ducha. "No hay desventajas particulares. Se trata más de una elección personal", afirmó, aludiendo a que depende de cada individuo decidir si quiere vaciar su vejiga en un lugar asociado a la higiene personal.

Sin embargo, no todos los especialistas coinciden. David Shusterman, urólogo en Nueva York, explicó que orinar durante la ducha puede ser útil para relajar los músculos del suelo pélvico, especialmente con el efecto del agua caliente. “Tomar una ducha caliente es una manera fácil de relajar los músculos, lo que ayuda a liberar la orina”, señaló.

Una de las principales críticas hacia esta práctica es la postura en que se realiza. En el caso de las mujeres, orinar de pie podría evitar que los músculos del suelo pélvico se relajen por completo, dificultando el vaciado completo de la vejiga. Sin embargo, Shusterman argumentó que, si bien esto puede suceder en algunos casos, el calor del agua favorece la relajación muscular y puede aliviar la tensión en los esfínteres urinarios.

El riesgo de infecciones también genera preocupaciones. Según Eilber, aunque la orina es mayormente estéril, puede convertirse en un problema si entra en contacto con heridas abiertas, ya que crea un ambiente propicio para bacterias y hongos. "Esto puede dificultar la cicatrización", advirtió.

Además, los expertos recomiendan evitar orinar en bañeras con agua estancada, donde el riesgo de infecciones aumenta significativamente.

Otro factor interesante es el impacto psicológico que puede tener el sonido del agua corriente. Este estímulo puede condicionar al cerebro a asociar el flujo del agua con la necesidad de orinar, un problema especialmente relevante en personas con vejiga hiperactiva.

EL HUFFPOST PARA PMS

En definitiva, orinar en la ducha no es una práctica peligrosa en la mayoría de los casos, pero podría ser mejor reservar la ducha para su propósito principal: la higiene personal. Como recalcan los expertos, la clave está en mantener la moderación y evitar posibles riesgos innecesarios.