Disfrutar del fin de semana o de las vacaciones en una furgoneta se ha convertido en algo cada vez más demandado. Pero hay situaciones como la que ha vivido una pareja de Nueva Zelanda que son de lo más surrealistas.

Tras disfrutar de un fin de semana de descanso, llegaron a casa y se encontraron con un animal en el interior. Se trataba de un rascón weka, una especie de ave gruiforme de la familia rallidae endémica de Nueva Zelanda.

La pareja no se percató de que el animal estaba en el interior del vehículo hasta que abrieron la puerta y lo vieron en la parte baja de uno de los asientos de la Ford Ranger con la que viajaron. 

"Al llegar a casa, abrí la puerta trasera de la Ranger para sacar algo, y allí estaba, en el espacio para los pies del pasajero trasero", ha razonado Kim Ranger, uno de los protagonistas.

"No podía parar de reír y entonces me di cuenta: ¿qué demonios haces con un weka en Christchurch?", ha cuestionado. Aunque llamó al Departamento de Conservación (DOC) para pedir ayuda, el animal manchó todo el coche de excrementos.

"No hay weka salvajes en Christchurch, así que no queremos que se introduzcan aquí accidentalmente. Es un buen recordatorio para que la gente tenga cuidado al transportar animales accidentalmente en su equipo", explicó Craig Alexander, su supervisor de biodiversidad.

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