Marc Giró responde siendo fiel a su estilo a todos los insultos que ha recibido

El humorista y presentador de Late Xou en RTVE, Marc Giró, convirtió este martes durante su monólogo los insultos que había recibido en las últimas semanas por humor con un sketch donde ironizaba con ser socialista. 

"Queremos volver a dar voz a algunos de nuestros odiadores habituales porque está también es su televisión, aunque a veces lo duden. Bienvenidos a una nueva edición de Esta noche nos insultan, en la que haremos un monográfico con mensajes que hemos recibido a través de las redes sobre mi supuesta devoción, y de todos los trabajadores de RTVE, al PSOE y a Pedro Sánchez", comenzó diciendo el presentador.

Tras leer algunos mensajes en los que le insultaban decidió ironizar sobre este asunto. "Estoy un poco preocupado con este tipo de mensajes porque lo de pseudoprogresista, nazi, subproducto, lameculos, payaso, cocainómano, subnormal, muñeco diabólico, putero o catalán me molesta menos, pero lo de socialista... por ahí no paso", aseguró, entonando casi como si fuera Belén Esteban. 

Entonces decidió narrar una escena ficticia para responder a estas personas: "El otro día merendando con una amiga le dije que me decían que era socialista y me contestó que claro que lo era".

"Al preguntarle desde cuándo, me respondió diciendo que era socialista y sanchista porque trabajo en RTVE y que todos los que trabajamos aquí, como toda España sabe, somos del PSOE. Antes eran del PP y ahora del PSOE y me dijo que lo aceptara porque eso va en el sueldo", prosiguió. 

Giró señaló que en ese ficticio momento se dieron cuenta que iban a llegar tarde a la modista. "Además de ser progresistas nos gusta ir monas", aprovechó para decir. Su amiga, relató, le propuso llamar a Moncloa para que le cedieran el Falcon y así llegar a tiempo, pero que dijera que iba a una manifestación a favor de Palestina y no a la modista. 

De nuevo, el presentador volvió a recrear esa conversación con una supuesta trabajadora de Moncloa: "Llamé, me presenté y le comenté que estaba con una amiga merendando, nos habíamos despistado y llegábamos tarde a una concentración proPalestina. Ahí le pedí si me podían poner el Falcon".

La respuesta fue que no porque "lo había solicitado Silvia Intxaurrondo para ir al gimnasio, pero que le ponía un helicóptero del ejército, que es muy seguro y estable y llegará igual de rápido". "En resumidas cuentas, que llegamos a nuestra cita puntualísimas y desde entonces lo he pedido porque lo utilizo mucho", siguió describiendo esa ficticia escena.

Finalmente, acabó por mandar un último mensaje a sus haters: "Desde entonces lo utilizo mucho, ahora he pedido que venga porque tengo una cena y no se lo voy a negar, me encanta ser socialista".