Se quedan a cuadros por lo que les ha hecho la camarera de la cafetería del tanatorio: para reflexionar
La empatía en una situación así brilló por su ausencia.

Es bien sabido que los camareros, y en general todos los trabajadores de la hostelería, tienen que aguantar a diario a clientes de todo tipo, incluidos gran número de personas desagradables.
Pero también ocurre en ocasiones al contrario: son los usuarios quienes tienen que soportar las malas formas de los trabajadores. Sirva como ejemplo la experiencia que ha compartido la usuaria de TikTok @leticia.bargallo, que tuvo que aguantar las malas formas de la camarera de la cafetería de un tanatorio en uno de los momentos más delicados de su vida.
"Tú imagínate que estás en el tanatorio, que acabas de incinerar a tu padre y dices: 'Voy a tomar una cafetito con mi familia, mis amigas, y así se me pasa el sofocón'. Y te toca una camarera que se pone a gritarte, a hablarte malamente y a faltarte al respeto. Le ha pasado a mi mejor amiga", señala.
"Hace unos días se nos fue el padre de mi mejor amiga de toda la vida y estábamos en el tanatorio, por desgracia, con un ambiente muy desagradable. Y dijimos: 'Vamos a desayunar'. Nos acabábamos de pegar la panzada a llorar porque mi amiga había dado un discurso super bonito y estábamos todas súper emocionadas, súper sensibles", contextualiza.
La usuaria lamenta que "desde el primer momento", la camarera les trató "como el culo, con un poco tacto que flipas": "Entiendo que no te guste tu trabajo, pero estás en un sitio en el que tienes que tratar a la gente con un mínimo de delicadeza".
"Pedimos, nos pone un montón de malas caras y cuando viene a traernos la comida le pone una tostada y dice: 'Esto no es mío, ¿de quién es, de alguna de vosotras?'. Y dice mi amiga, la que había fallecido su padre: 'No, tía, no te preocupes que falta una'. Esa camarera se da la vuelta y hace: '¡Mira, señora, estás viendo ahí en la barra todas las cosas que hay! ¿Sabes todo lo que has pedido? ¿Crees que tengo 40 manos?", relata.
"Os juro, os juro, que con una agresividad.... Mi amiga, que acababa de llorar la pérdida de su padre, no dábamos crédito. Llega a cogerme en otra situación y le monto un pifostio que puede flipar. Creo que un tanatorio no es el sitio más adecuado para tratar así a la gente", reflexiona.
