Una 'wedding planner' asegura que estas tres cosas deberían estar prohibidas en las bodas
La última trae cola.

Lidia, una diseñadora de bodas y eventos que cuenta con un canal de creación de contenidos conocido como 'La Dupla Eventos' (@ladupla_eventos) junto con Lili Mathews, su socia, ha asegurado que hay tres cosas que deberían prohibir en las bodas por lo mal que pueden salir o porque moral y socialmente no es del todo correcto, especialmente por no mostrar respeto al acto ni a sus protagonistas, los novios.
Lo primero que ha mencionado en un pódcast propio, en el que la propia Lili la entrevistaba, ha sido el hecho de organizar una boda en la que los invitados acaben pasando hambre. "Las bodas en las que pasas hambre, por muy bonito que esté el sitio, si luego te tienes que ir a tomarte un bocadillo... Todo mal, algo ha fallado", ha afirmado.
Por otro lado, algo que no soporta en las bodas es el confeti líquido, algo menos habitual en estas celebraciones. "¿Quién ha inventado eso? No, horror, te pringas entero, se te mete por todos los sitios, es fatal, desgracias el vestido, el traje, lo que lleves...", ha defendido.
Lo último, pero no menos importante, que prohibiría son los teléfonos móviles. "Cuando todo el mundo está con el móvil, que estás en la ceremonia que no es ni una, ni dos personas, sino que está como todo el mundo solo grabando, nadie está disfrutando", ha contado.
"Los novios entran y ven pantallas, o sea, no en ojos llenos de emoción... Solo ven pantallas, es superfrío. Tienes que ver a la novia entrar, al novio emocionarse y siempre digo que equipos de vídeo y de fotografías va a haber de sobra", ha concluido.
El error más común de los novios
Para Lidia, el error más común de los novios que están planificando la boda es el presupuesto. "Los novios llegan con ideas maravillosas de Pinterest, ideas increíbles, y luego nos dicen el presupuesto y en algo va a tener que recortar porque al final hay que tener claro que el presupuesto de una boda se hace con Excel", han comentado.
Tal y como ha contado en el mismo pódcast, el Excel en el que se planifica una boda es como una "tercera persona de la relación, duermes con él, el trabajo presupuestario es un poco marrón, la parte menos bonita".
