El Real Madrid pasa por encima del Manchester City (3-1) y se clasifica a octavos de Champions

A octavos sin agobios. Al contrario de lo ocurrido en el partido de ida, en el que el Real Madrid tuvo que remontar en los cinco minutos finales, el equipo de Carlo Ancelotti ha cuajado un partido muy completo y no ha dado opciones a un Manchester City al que ha vencido por 3-1 con un hat-trick de un sensacional Kylian Mbappé.

El vigente campeón de Europa, como siempre desde el cambio de formato, estará en los octavos de final de la Champions, donde tendrán que enfrentarse al Atlético de Madrid o al Bayer Leverkusen. Y lo hará después de eliminar al Manchester City con un sobresaliente encuentro arropado por su público, para completar el mejor partido de los blancos ante los 'citizens' en la ristra de enfrentamientos directos entre ambos equipos.

La grada del Bernabéu tuvo que corear hasta en tres ocasiones el nombre de su estrella, porque Mbappé convirtió un triplete (se coloca con 7 goles en la tabla de goleadores) en su mejor actuación con la camiseta blanca. Después del 2-3 de la ida, la eliminatoria quedó casi decidida por el 2-0 de la primera mitad ante un City sin alma que nunca dio sensación de querer darle la vuelta.

El tercero y definitivo llegó en la segunda parte, ya con un equipo inglés derrotado, que solo podía aguantar los olés de la grada y agachar la cabeza, aunque pudo celebrar el de la honra en el descuento, obra de Nico González. Cae Guardiola pronto y el Real Madrid salva el primer obstáculo por su mala primera fase, en un partido que dejó la mala noticia de la amarilla a Jude Bellingham, que se perderá la ida de octavos.

Con muchos centrocampistas, el Manchester City se hizo con el balón en el inicio, ante el bloque medio-bajo del conjunto madridista, que no quería asumir riesgos. Pero en la primera posesión larga de los blancos, Raúl Asencio se inventó un pase teledirigido a Mbappé, a la espalda de Rúben Dias, y el francés no falló con una vaselina sobre Ederson. El Real Madrid encontraba el mejor escenario posible para encauzar los octavos de final.

Primer golpe en la mandíbula para el equipo inglés, que también vio como, antes del minuto 10, John Stones se retiró lesionado dejando su hueco a Nathan Aké. Los de Pep Guardiola no cambiaron el plan, y continuaron teniendo el protagonismo con la pelota, aunque los blancos no estaban incómodos, con zarpazos ofensivos, como un remate de cabeza de Jude Bellingham a la salida de un córner que se marchó cerca del larguero.

Un error al rechazar un balón largo de Khusanov pudo costarle caro a un City que aguantaba los arreones comandados por unos entonados Mbappé y Vinícius Júnior. El Real Madrid apenas tenía que esforzarse en sostener a un equipo 'citizen' sin la tensión ni el ritmo que demandaba su situación desfavorable en la eliminatoria, dos goles por debajo. Y lo acabó pagando con el 2-0, de nuevo obra de Mbappé.

El francés, después de un pase forzado de Rodrygo, sentó al potente Gvardiol con un recorte seco dentro del área y definió pegado al palo. Era un monólogo del Real Madrid, que veía recompensado su inicio serio para poner pie y medio en la siguiente ronda.

Ni Guardiola, pese al caos, ni Ancelotti, contento con la primera parte, introdujeron cambios tras el descanso, y como era de esperar, el guion fue el mismo, con el Real Madrid rozando el 3-0 en un disparo lejano de Rodrygo Goes. Fede Valverde era un puñal por la derecha, y en uno de sus centros precisos, Mbappé estuvo a punto de completar su hat-trick.

Pero no tuvo que esperar mucho más. El francés recogió un balón en la derecha cerca de la esquina del área y, tras dos bicicletas, remató secó al palo largo para, ahora sí, cerrar su triplete particular y el 3-0 que sentenciaba la eliminatoria rumbo a octavos. El City ya tiró la toalla y el partido entró en un ritmo más bajo, escuchándose incluso olés en la grada con cada pase del equipo de Ancelotti.

El equipo blanco buscó el gol de Vinícius Júnior, el más insistente en la segunda parte y una pesadilla constante para Khusanov por la izquierda. Aunque dio tiempo al gol de la honra del City, que llegó a balón parado, después de que un lanzamiento de falta de Marmoush golpeara en el larguero y el rechace lo rematara Nico González a la red.