La empresa que ha incrementado su negocio en Rusia a pesar de la guerra

La empresa que ha incrementado su negocio en Rusia a pesar de la guerra

Muchas compañías anunciaron que abandonarían el país dirigido por Vladímir Putin a raíz de la invasión militar a Ucrania. Sin embargo, hay una que no ha cumplido ese compromiso.

Vladímir Putin fotografiado el 23 de diciembre de 2019 (Mikhail Svetlov/Getty Images)Mikhail Svetlov via Getty Images

Una gran mayoría de las empresas internacionales que operaban en Rusia decidieron poner fin a sus negocios en el país dirigido por Vladímir Putin a raíz de la invasión militar a Ucrania de la que este viernes 24 de febrero se cumplirá un año.

Sin embargo, hay una compañía que, aunque anunció que saldría de Rusia, no solo no ha cumplido su compromiso sino que ha incrementado su negocio en el país. Se trata de Heineken, tal y como ha denunciado este martes la plataforma de investigación periodística Follow the Money (FTM) y recoge EFE.

La cervecera neerlandesa lanzó al menos 61 nuevos productos en el mercado ruso a lo largo del año pasado, según una descripción general del negocio de Heineken Rusia en 2022, un año que la filial rusa de la empresa califica de “turbulento para todos los actores del mercado, pero al mismo tiempo con muchas nuevas oportunidades de crecimiento”.

“Estamos orgullosos de anunciar que hemos alcanzado niveles récord en múltiples segmentos”, ha destacado Heineken Rusia en su página web, según FTM, que asegura haber accedido a la página web de la empresa antes de que hoy dejara de estar inaccesible.

Esas palabras no son coherentes con lo que transmitió la firma el 9 de marzo de 2022, cuando Heineken anunció que dejaría de producir y vender de forma inmediata su cerveza en Rusia y señaló que no aceptaría ganancias de sus operaciones en ese país debido a la guerra. Ese último punto, además, también afectaba a las otras marcas de la compañía, como Affligem, Amstel y las cervezas locales rusas.

Heineken se ha aprovechado de las ausencias de Coca Cola y Pepsi

La cervecera también se comprometió a suspender todas las nuevas inversiones y exportaciones a Rusia. Pero, según la página web a la que hace referencia FTM, Heineken incluso introdujo refrescos no alcohólicos en el mercado ruso debido a la retirada de los productos de Coca Cola y Pepsi.

El balance de 2022 indica que la empresa dejó de producir cerveza Heineken en Rusia el año pasado, pero el fuerte crecimiento de Amstel, propiedad del mismo grupo empresarial neerlandés, llenó el vacío: Heineken Rusia lanzó 61 productos nuevos “en tiempo récord” y vendió 720.000 hectolitros más de cerveza y refrescos.

Al respecto de esta investigación de la citada plataforma periodística, un ejecutivo de Heineken ha justificado que “si se quiere vender la empresa, hay que maximizar la participación de mercado en el corto plazo para aumentar su valor”, por lo que “cuanto mejor lo hagan, antes encontrarán un comprador”.

En cualquier caso, el directivo ha reconocido que la situación es “hipócrita” y “está en absoluta contradicción con la versión oficial sobre la desinversión”.

“Heineken se está beneficiando cínicamente del hecho de que las principales marcas internacionales se hayan retirado de Rusia. Las marcas Budweiser y Carlsberg eran mucho más importantes allí. Heineken llena ese vacío invirtiendo fuertemente en sus propias marcas locales e internacionales”, ha llegado a afirmar el alto cargo de la compañía.

Por su parte, la empresa cervecera ha detallado a FTM que necesita un periodo de transición para reducir las actividades en Rusia y encontrar un nuevo propietario con el que espera llegar a un acuerdo en los próximos meses.

Heineken España desmiente las acusaciones

Por el contrario, Heineken España desmiente que la realidad responda a lo que apunta la plataforma de investigación periodística Follow the Money. La compañía destaca que “estamos haciendo un esfuerzo para transferir nuestro negocio a un comprador viable en unas circunstancias difíciles y anticipamos una pérdida financiera significativa para la empresa, que asciende a alrededor de 300 millones de euros”.

“Durante este período de transición, nuestros empleados en Rusia están haciendo todo lo posible para mantener el negocio en marcha, después de eliminar por completo la marca Heineken, para evitar así la nacionalización y garantizar que los medios de subsistencia de nuestras personas no corran peligro”, precisa la firma.

En ese sentido, Heineken España asegura que “no hay intercambio de fondos entre Heineken y nuestro negocio local en Rusia y no recibimos dividendos, honorarios ni royalties (para ninguna marca)” y subraya que el objetivo es abandonar Rusia “de una manera correcta, cumpliendo nuestro firme compromiso tanto con la salida como con nuestra gente, en la primera mitad de 2023”.