"Interesante", "insuficiente", "electoralista": lo que el campo opina de las medidas antisequía

"Interesante", "insuficiente", "electoralista": lo que el campo opina de las medidas antisequía

Cuatro representantes de organizaciones agropecuarias analizan el paquete aprobado por el Gobierno y ponen deberes "urgentes" antes y después del 28-M.

Peces muertos sobre un campo yermo, una imagen de archivo que vuelve a repetirseAFP via Getty Images

Se suceden los adjetivos según van desglosándose las medidas. Han pasado las suficientes horas para que el campo se haya empapado de la letra pequeña del esperadísimo paquete contra la sequia. Y el sector saca conclusiones enfrentadas, porque para la mayoría no ha sido la lluvia de medidas y millones deseada, pero sí un "buen comienzo".

El plan de urgencia anunciado por el Gobierno en un Consejo de Ministros extraordinario que sorprendió a todos  mezcla dinero —alrededor de 650 millones en ayudas directas— mejoras laborales y más facilidades para el desarrollo de una actividad cada vez más difícil de sacar adelante. "Un esfuerzo importante pero del todo insuficiente", comentan de forma casi unánime las distintas voces consultadas por El HuffPost.

Portavoces destacados del sector primario ven luces y sombras en un marcadísimo contexto de campaña electoral. Nadie pasa por alto que el anuncio ha llegado de sopetón y en un Consejo de Ministros extraordinario el día antes del arranque oficial de campaña. "Suena a lo que suena", cuentan los entrevistados.

Tampoco es una queja, matizan. Es un punto de partida y por eso ahora el campo pide más y, sobre todo, que Gobierno y comunidades le escuchen para darle forma a unas medidas "a definir cuanto antes". "Nos jugamos una crisis de país y un problema muy serio para la marca España", advierte Ramón Surroca, presidente de la Federació de Cooperatives Agràries de Catalunya (FCAC).

Entre la "buena intención" y la falta de detalle y dinero

"Con este decreto, si se quiere, se puede dar una respuesta rápida y valoramos especialmente esa respuesta ágil del Gobierno, pero a partir de aquí, mucho por trabajar", expone Ignacio Huertas, secretario ejecutivo de UPA. En primer lugar, para las comunidades, a quienes les toca "responder" con idéntica agilidad.

Su compañero Luis Cortés, secretario estatal de la Unión de Uniones, es algo más duro y habla de "parche". "Sólo en el sobrecoste de alimentación animal hablamos de unos 5.000 millones ya. Si tú ayudas con 300 millones qué vas a hacer". Y abre otra 'patata caliente' recurrente en las negociaciones, el cómo y a quién distribuir el dinero.

"¿A cuánto toca la ayuda con tantos millones de hectáreas afectadas? Porque se han aprobado ayudas a todo el mundo sin discriminar quién vive del campo y quién lo tiene como segunda actividad y no se puede responder con perfecta igualdad a una situación tan desigual", añade.

No conozco ninguna gran explotación que haya cerrado por sequía pero sí muchas pequeñas… y en esas estamos ahora
Ignacio Huertas, secretario ejecutivo de UPA

Huertas toma la palabra de nuevo para incidir en un asunto que califica de crucial, "priorizar las explotaciones familiares y poner techo a las ayudas por explotación". "Llevo muchos años en el campo y te digo que no conozco ninguna gran explotación que haya cerrado por sequía pero sí muchas pequeñas… y en esas estamos ahora y lo urgente es que estas explotaciones tengan el dinero ya".

Desde COAG, su responsable en temas de sequía, Javier Fatás tiene claro que lo anunciado "se ha quedado muy corto, especialmente en agricultura, y no se entiende que no haya ayudas concretas directa al cereal". Como él, Luis Cortes "agradece que espabilen, pero con esto no vamos a ningún sitio". 

"Ante un problema muy grave no se puede parchear. Necesitamos un único real-decreto mucho más amplio", cierra sobre este capítulo.

Lo mejor del paquete anunciado por el Gobierno

Hace tres semanas, los participantes en la "desilusionante" Mesa de la Sequía admitían que "lo mejor" era que había una radiografía común del problema. Y esa radiografía se ha repetido en la mesa del Consejo de Ministros. "Ya se han puesto números a una situación caótica y créeme que eso ya es un avance", asevera el presidente de los agricultores catalanes. Para Ramón Surroca otro de los puntos clave de este paquete es que "nos dicen que es una primera tanda de medidas". 

Hay que verse yo creo que hasta el mismo Pedro Sánchez, porque hablamos de un problema transversal de país y soluciones transversales que tocan a muchos ministerios
Ramón Surroca, presidente de la FCAC

Las buenas palabras sobre la voluntad gubernamental aparecen en todas las conversaciones. El miembro de UPA destaca "la agilidad con la que han reaccionado dando respuesta. Las ayudas son eficaces si son ágiles, por eso ahora hay que convocar una Mesa de la Sequía y negociar y concretar esas medidas anunciadas".

También hay cierta unanimidad en otras cuestiones más allá de lo monetario. Javier FAtas aplaude "lo aprobado en cuanto a flexibilidad y condicionalidad de las ayudas de la PAC, así como el paquete de medioambiente". Incluso otras cuestiones como la reducción de módulos de IRPF, que dice "tenía que llegar sí o sí ante la bajada de producción y facturación". 

Varios colegas complementan como muy positiva la extensión de los seguros agrarios, una herramienta "hasta ahora muy poco útil y que ahora incrementará hasta un 70%".

¿Electoralismo? Bienvenido sea, dice el campo

"Pues ojalá hubiera elecciones todos los meses para que hicieran cosas, qué quieres que te diga", confiesa entre risas Luis Cortés. Más en serio, admite "lo obvio": "Montar hasta un Consejo de Ministros tan urgente, sacar un decreto a toda prisa, pues claro que pesa la fecha electoral". Sus palabras son las de sus compañeros. 

Como las de Surroca, que pide "no ser ingenuos, ahora todos los 'colores' tienen prisa, así que yo le doy la vuelta. Aprovechemos que es momento electoral para que asuman unos compromisos porque esto es un problema de país".

Lo que tiene claro Javier Fatás es que detrás de ese "electoralismo" evidente, hay un paquete "que se puede y debe poner en práctica desde ya, no son precisamente inalcanzables, de hecho es que son muy justas".

Se han aprobado ayudas a todo el mundo sin discriminar quién vive del campo y quién lo tiene como segunda actividad y no se puede responder con perfecta igualdad a una situación tan desigual
Luis Cortés, secretario ejecutivo de la Unión de Uniones

Y el 29 de mayo, ¿qué?

Metidos en la vorágine de la campaña, parece no haber vida más allá del megadomingo 28, pero como incide Ignacio Huertas, "tras las municipales llegarán las generales, aunque yo espero que el camino se empiece a allanar ya, incluso antes del domingo 28", expone el representante de UPA, reclamando cuanto antes "volver a convocar una Mesa de la Sequía". 

En ella ya no quieren una cita de segundo nivel con representantes de Agricultura y Transición Ecológica. Piden hablar directamente con los ministros Planas y Ribera "o incluso Pedro Sánchez, porque de verdad "hablamos de un problema transversal de país y soluciones transversales que tocan a muchos ministerios".

Votos y mucha fuerza de un sector que ya ha demostrado su capacidad de echarse a las calles, como ocurrió meses antes de que el covid parase el mundo. "Negociar seguiremos negociando, eso está claro, alza la voz Javier Fatás, especialmente al reclamar que se cuente con "los sectores que han faltado esta vez". 

Sea con Sánchez, con Planas y Ribera o con un tercer escalón gubernamental, "cuando pase el 28-M y sin tantas urgencias electorales tocará hablar con tranquilidad para ver qué medidas se pueden aplicar y reforzar, que no todo es dinero", añade el responsable de la Unión de Uniones.

"Pero que nadie dude que estaremos encima, porque de esto depende hoy por hoy nuestra supervivencia, la de un sector con un balance comercial fundamental para la marca España. Perder esto un año con el riesgo de seguir perdiendo es una ruina de país", sentencia a modo de conclusión Ramón Surroca. 

El 28 de mayo, gane quien gane, el que no puede perder es el campo.

MOSTRAR BIOGRAFíA

Miguel Fernández Molina (Sabiote, Jaén, 1987) es periodista licenciado por la UCM. Trabajó ocho años en el medio digital 'Mundotoro' antes de llegar a 'El HuffPost', donde ejerce de responsable de cierre y escribe sobre deporte, internacional y política, entre otros campos.