El Kremlin afirma que "no habrá posguerra" en Rusia tras un alto al fuego en Ucrania y los expertos salen a contradecir
"No se puede volver a meter la pasta de dientes en el tubo", afirman.
El Kremlin está debatiendo maneras de "normalizar" la vida en Rusia en caso de un alto el fuego con Ucrania, según informó Verstka Media el viernes, citando fuentes del gobierno de Putin y medios estatales.
Las medidas propuestas van desde la eliminación de ciertas personas de la lista negra de "agentes extranjeros" del Ministerio de Justicia hasta el regreso de Ivan Urgant, el principal presentador de un programa nocturno de entrevistas ruso antes de la invasión a gran escala.
Sin embargo, no todas las fuentes de Verstka coinciden en que estas propuestas sean serias y alguaos expresaron dudas sobre si el Kremlin desea la "normalización" o si Rusia podrá volver a la realidad de antes de la guerra.
El debate sobre el regreso de Urgant forma parte de las conversaciones más amplias dentro de la administración presidencial sobre la "normalización" de la vida en Rusia, una idea que, según informa el medio Meduza, el Kremlin lleva varios meses considerando.
"Existe un plan llamado 'Recuperar la Rusia de 2021', cuyo objetivo es recuperar a quienes se marcharon tras la invasión a gran escala de Ucrania. Lo están desarrollando y debatiendo en previsión de un posible cese de los combates", declaró a Verstka un miembro del personal de la administración.
Más allá de la televisión, el Kremlin también está explorando maneras de facilitar el regreso de los rusos que se marcharon durante la guerra pero que "no participaron en actividades ilegales", informan. Las autoridades creen que su regreso contribuiría a la "recuperación posbélica" del país, con especial atención a la reintegración de empresarios privados y especialistas en tecnologías de la información.
Sin embargo, Verstka señala que no parece haber un enfoque unificado dentro del Kremlin. Algunas fuentes de la administración no pudieron confirmar que el gobierno realmente tenga intención de llevar a cabo planes de "normalización", expresando su escepticismo. Varios señalaron que "la administración siempre está elaborando algo, pero el 90% de esos planes acaban en la papelera".
Una fuente afirmó: "Hasta el momento, no se está considerando nada ajeno a la agenda militar-patriótica". No veía motivos para que las autoridades rusas buscaran la normalización de relaciones ni una amnistía a gran escala para agentes extranjeros. "No se puede volver a meter la pasta de dientes en el tubo", afirmó, añadiendo que quienes discuten tales planes "no comprenden lo que realmente ha sucedido".