Rusia, China e India desafían a Occidente y escenifican la fortaleza del nuevo "orden multipolar" en la cumbre de la OCS
Los mandatarios de los 10 países miembros de la OCS, en representación de casi el 40% de la población mundial, firmaron una declaración en la que "condenan enérgicamente" la crisis humanitaria de Gaza, la guerra arancelaria de Trump y reivindican la alianza y poder del frente "multipolar".

Durante los últimos días, gran parte de las miradas internacionales -con permiso de Gaza- se han centrado en Oriente; concretamente en Tianjin (China), donde ha tenido lugar la 25ª cumbre de la OCS (Organización de Cooperación de Shanghái). Lo más esperado de la cumbre ha tenido lugar este lunes, cuando los tres grandes líderes reunidos, Xi Jinping, Vladimir Putin y Narendra Modi han intervenido y han escenificado una fuerte unidad que desafía la hegemonía de Occidente.
Los tres líderes, fieles defensores del nuevo orden mundial multipolar, han dado una clara muestra de unión, aunque con varios frentes abiertos que han sido objeto de debate, como la crisis humanitaria de Gaza, la guerra arancelaria desatada por Trump y el conflicto en suelo ucraniano.
Como dato llamativo, hay que destacar que los tres presidentes, junto al resto de líderes de la alianza, han actuado en representación de casi el 50% de la población mundial, lo que inevitablemente hacía de este OCS un acontecimiento mundial y calificado como el de mayor envergadura desde la fundación de la organización en 2001. La cita ha culminado con una declaración conjunta que destaca el papel esencial y fundamental de la OCS en el nuevo tablero geopolítico.
La cita ha arrancado con un discurso del presidente chino y anfitrión, Xi Jinping, en el que ha pedido a los estados miembros del bloque "derribar muros y no construirlos", al tiempo que anunció una partida de ayudas de 280 millones de dólares que China destinará a todos los países miembros. Asimismo, en su primera intervención ha destacado la necesidad de "oponerse al hegemonismo y al proteccionismo", en clara referencia a las políticas arancelarias impuestas por Donald Trump.
En este sentido, el mandatario chino defendió que la OCS debe constituirse como "un pilar de la multipolaridad y de la democratización de las relaciones internacionales", además de servir para "resolver los conflictos internacionales y regionales mediante un enfoque de bloques y de confrontación", señalando que sus miembros "no serán jamás enemigos".
Una afirmación especialmente relevante si se tiene en cuenta que el pasado mes de junio, en una reunión entre los ministros de Defensa de los estados miembros, el representante indio y pakistaní se opusieron a una declaración conjunta por las tensiones desatadas respecto al ataque indio que se cobró la vida de 26 personas en Cachemira.
El otro gran momento de la jornada tuvo como protagonista a Vladimir Putin, más si cabe tras su encuentro con Trump durante la pasada semana en Alaska. El mandatario ruso agradeció "los esfuerzos" que tanto China como India han realizado por acabar con la guerra en Ucrania y destacó una vez más que el conflicto tuvo como detonante los "intentos de Occidente de incorporar a Ucrania a la OTAN".
Condenas a injerencias internas y "profunda preocupación " por Gaza
El tercero en discordia, Narendra Modi, centró gran parte de su intervención en criticar las injerencias internas y pidió "tolerancia cero contra el terrorismo transfronterizo, el separatismo y el extremismo". En este asunto, la OCS se mostró contundente y rechazó rotundamente las "injerencias en asuntos internos" condenando en la declaración las "conmociones al comercio internacional", nuevamente en referencia al presidente estadounidense.
Asimismo el escrito condena "de forma enérgica" el atentado de abril en Cachemira, protagonizado por India y también advierte contra "la propagación de ideologías radicales, la intolerancia religiosa, la xenofobia, el nacionalismo violento y la discriminación racial y étnica".
Otro de los temas abordados durante la cumbre ha sido la guerra en Gaza y la crisis humanitaria que se vive en la Franja desde hace casi dos años. Respecto a este asunto, los líderes han mostrado su "profunda preocupación" y en el escrito han señalado que la "única manera de garantizar la paz y la estabilidad en Oriente Medio es una solución integral y justa a la cuestión palestina".
Así, condenaron "enérgicamente" el "desastre humanitario" en la Franja de Gaza y destacaron la necesidad de lograr un alto el fuego integral y duradero lo antes posible", así como "garantizar el acceso de la ayuda humanitaria a Gaza".
Del mismo modo, los estados miembro han criticado rotundamente "la agresión militar lanzada por Israel y Estados Unidos contra Irán en junio" al considerarlo "una grave violación del derecho internacional".
Ucrania también preocupa... pero no suficiente
Sin embargo, en la declaración conjunta no se ha hecho ninguna referencia al conflicto entre Ucrania y Rusia, aunque sí que ha hecho mención en varias ocasiones durante la cumbre. Uno de los más participativos en esta cuestión ha sido Modi, que dialogó con Putin durante un largo rato, le reconoció los "esfuerzos recientes" para lograr la paz y calificó la solución como "un ruego de toda la humanidad".
Del mismo modo recordó que India y Rusia han caminado "hombro con hombro" pese a la presiones de Washington, que recientemente sancionó a India con aranceles en represalia a la compra de crudo ruso del gigante asiático.
Así, en el escrito se recoge que "los Estados miembros aboguen por la construcción de un mundo de paz duradera y exigen una respuesta coordinada a las amenazas y desafíos a la seguridad".
