Un bombardero ruso invade el espacio aéreo de la OTAN: "Es inaceptable"

Suecia notificó el pasado viernes 14 de junio de la presencia de un avión ruso Su-24, que terminó siendo interceptado por un caza JAS-39 Gripen. Esto ha sido considerado como una provocación por parte del ejecutivo sueco, que considera que una violación de su espacio aéreo de este calibre no puede ser admisible teniendo en cuenta el contexto político actual.

Dicha intercepción tuvo lugar a la altura de Gotland, la isla más grande ubicada al sur del país escandinavo. Aunque este no es el primer episodio de este tipo protagonizado por aviones rusos, sí lo es en el país sueco.

Algunas de las teorías que maneja la inteligencia sueca apuntan a que este hecho puede ser consecuencia de la incorporación de la Fuerza Aérea Sueca a las Misiones de vigilancia aérea del Mar Báltico, donde se encuentra Gotland.

De acuerdo con lo que narra la aviación sueca, el avión ruso fue alertado por radio por el Comando Aéreo de Combate de que estaba entrando en territorio sueco, aunque según informan, esta advertencia fue ignorada por el piloto, que continuó en su trayecto hacia la isla.

Debido a esta situación, el caza Saab Gripen decidió intervenir e interceptar la aeronave rusa, momento en el que fue identificada como un Sukhoi Su-24. Una vez repelida la 'amenaza', el gobierno sueco informó de que la invasión de su espacio aéreo duró "poco tiempo".

La nave rusa fue identificada después de comprobar que portaba el número 54 en rojo en el lateral, por lo que todo hacía indicar que se trataba del modelo ya mencionado, que es llamado por la OTAN como Fencer-E, y que se trata de una variación del bombardero Su-24M.

“La acción rusa es inaceptable y demuestra una falta de respeto por nuestra integridad territorial. Seguimos todo el proceso y estuvimos ahí para intervenir”, fueron las palabras del jefe de la Fuerza Aérea, Jonas Wikman.

Pese a la breve duración de la invasión, las consecuencias fueron más importantes, hasta el punto de que el ministro de Exteriores sueco, Tobias Billström, aseguró en la televisión SVT, que convocaría al embajador ruso con el fin de que explique lo sucedido.

“El comportamiento ruso es inaceptable. El Ministerio de Asuntos Exteriores llamará a la embajada rusa para informar del incidente”., aseguró el ministro. “Estamos en estrecho contacto con aliados y socios sobre eventos en el área inmediata.

De acuerdo con lo que indica el portal Aviationist, la posibilidad que gana más enteros es la de que se tratara de una acción intencionada, con el objetivo de comprobar el tiempo que tardaban en responder los Gripens suecos ante una situación de alerta.