Una viróloga revela el tipo de frutas y verduras que pueden salvarse después de detectar una parte mohosa
"Las raíces del hongo son invisibles y pueden penetrar muy profundamente en el alimento", advierte la experta.

Encontrar moho en una fruta o verdura es para muchas personas un sinónimo de tirar el alimento a la basura. Sin embargo, hay algunas en concreto que pueden salvarse pese a contar con ese defecto.
Así lo ha asegurado la viróloga francesa conocida en la red social Instagram como thefrenchvirologist. La experta ha precisado que si la fruta es "porosa" no hay más remedio que tirarla a la basura, sin embargo, si es una fruta o verdura "dura", se puede cortar la parte mohosa con un cuchillo y consumir el resto.
"El moho que se ve a simple vista suele ser solo la punta del iceberg, ya que las raíces del hongo son invisibles y pueden penetrar muy profundamente en el alimento, especialmente si es poroso", ha explicado la viróloga.
Por ello, "todas las frutas y verduras porosas con moho no deben consumirse y deben tirarse". En la categoría frutas y verduras "porosas" se incluyen los tomates, los pepinos, los calabacines, las fresas, los melocotones, los albaricoques, los pimientos, las naranjas y los melones.
Las frutas y verduras que pueden conservarse pese al moho
Por el contrario, la viróloga ha destacado que "en el caso de las frutas y verduras 'duras' con moho, se puede cortar alrededor de 2,5 centímetros y conservarlas" sin que exista riesgo para la salud.
En concreto, las frutas y verduras 'duras' que se pueden consumir tras retirar la parte con moho son, entre otras, las zanahorias, las manzanas, las peras (muy firmes), las patatas y las calabazas.
