Esta es la cantidad de veces "normal" que deberías levantarte al baño por la noche según tu edad
Con la edad se produce menos hormona antidiurética lo que afecta a este problema.
La cantidad de veces que una persona necesita levantarse al baño cada noche puede ser simplemente anecdótico o tener que ver con que bebe demasiada agua u otros líquidos en las últimas horas anteriores a irse a la cama. Pero también podría ser un síntoma de alguna problema de salud. Aunque según explican los experto, en ello tiene mucho que ver la edad.
"Algunos problemas, como beber demasiado por la noche o tomar demasiadas bebidas con cafeína a lo largo del día, pueden tener fácil solución", explica la enfermera Davina Richardson, de la organización benéfica Bladder and Bowel UK, al Daily Mail.
Es más, parece que ir más veces que una por noche podría indicar un problema, sobre todo antes de los 60 años. Puede ser un signo de diversas afecciones, como una infección del tracto urinario hasta enfermedades como diabetes, presión arterial alta, cáncer de próstata o incluso enfermedades cardíacas.
Es decir, el umbral de lo que se considera normal cambia con la edad, según un estudio del sistema público de salud de Reino Unido (NHS), ya que, por ejemplo, menciona que para las personas mayores de 70 años, despertarse a orinar dos veces cada noche es relativamente normal. Y ya a los 90 años, la cantidad puede aumentar, de forma normal, a cuatro veces por noche debido a que a medida que el cuerpo envejece produce menos hormona antidiurética (ADH).
Resulta que esta hormona regula la cantidad de agua que retenemos y ayuda a prevenir la deshidratación, pero puede ser un síntoma que nos deba alertar si el aumento en la frecuencia del uso del baño viene acompañado de otros problemas o dolores.
Algunos ejemplos que pueden indicar una posible diabetes son tener mucha sed, perder peso demasiado rápido y tener visión borrosa además de necesitar ir más al baño. Esto se debe a que el alto nivel de azúcar en sangre aumenta la sed y la necesidad de beber agua, lo que lleva a frecuentes viajes al baño durante la noche.
También una afección cardíaca puede provocar una mala circulación, lo que puede provocar hinchazón de tobillos. Según la NHS, este exceso de líquido se reabsorbe en el torrente sanguíneo y los riñones lo eliminan, lo que aumenta la necesidad de ir al baño.
La buena noticia, según estos expertos, es que aunque necesitar ir mucho al baño puede ser un síntoma temprano de algunas afecciones médicas, también se puede solucionar con simples cambios en el estilo de vida. Y, antes todo, estando alerta ante cualquiera de estos síntomas porque la detección a tiempo es la mejor garantía de que la cosa no vaya a mayores, nunca mejor dicho.
