Soy técnica en nutrición y esto es lo que tu cerebro quiere que metas en tu cesta del supermercado
Prioriza, para su buen funcionamiento, la supervivencia, el placer inmediato y los nutrientes esenciales.

Cuando paseamos por los pasillos del supermercado, no sólo el estómago dicta nuestras decisiones; el cerebro juega un papel clave en lo que escogemos, advierte la técnica en Nutrición y Dietética Ana Luzón. Así, se podría decir que, desde su perspectiva, prioriza la supervivencia, el placer inmediato y los nutrientes esenciales para su correcto funcionamiento. Esta nutricionista cuenta lo que nuestro cerebro "quiere" que metamos en el carrito y las razones de ello.
En primer lugar, nos pide alimentos ricos en grasas saludables. "El cerebro está compuesto en un 60% por grasas, lo que lo convierte en un órgano dependiente de estos nutrientes. Así que busca incluir son pescados grasos como el salmón o las sardinas (ricos en ácidos grasos omega-3). También opta por frutos secos y semillas, como nueces, chía y lino, que aportan grasas esenciales y antioxidantes, o también por aguacate, una excelente fuente de grasas monoinsaturadas. Estas grasas apoyan la salud cognitiva y ayudan a prevenir enfermedades neurodegenerativas", explica Luzón.
En segundo lugar, el cerebro nos pide fuentes de glucosa estable. "Necesita energía constante, y su principal combustible es la glucosa. Pero le vale no cualquier glucosa, pueden ser cereales integrales, como avena o pan integral, que liberan energía de forma sostenida. También podemos optar por las frutas frescas, que además aportan antioxidantes para combatir el estrés oxidativo. Y también por las legumbres, que combinan carbohidratos complejos y proteínas vegetales. Pero debemos evitar los azúcares refinados, ya que aunque generan un placer instantáneo, terminan afectando la memoria y el enfoque a largo plazo", añade esta nutricionista.
También necesita nuestro cerebro alimentos ricos en antioxidantes. Esto se debe a que "es especialmente vulnerable al daño oxidativo", afirma esta experta en dietética. "Por lo que debemos incluir antioxidantes en tu dieta protege las neuronas, como los arándanos y las fresas, que se asocian con mejoras en la memoria. También nos valen para esto las espinacas y el kale, que son ricos en vitamina E y luteína, aliados de la cognición. Y, no nos olvidemos del chocolate negro (mínimo 85% cacao), ya que su contenido en flavonoides mejora la circulación cerebral", recomienda Luzón.
La cuarta demanda de nuestro cerebro son las proteínas de calidad. "Los aminoácidos son esenciales para producir neurotransmisores como la serotonina o la dopamina. El cerebro agradece, por ejemplo, los huevos, por su contenido en colina, clave para la memoria. También las legumbres y la quinoa, que son ricas en proteínas completas y fibra, así como las carnes magras y el pescado, relevantes fuentes de aminoácidos esenciales", prosigue la nutricionista.
Y, en quinto lugar, el cerebro necesita hidratación y micronutrientes clave. "Un cerebro bien hidratado es más eficiente", destaca Luzón. "Algunos micronutrientes son desde el agua a las bebidas naturales, como las infusiones sin azúcar. Otra opción son los alimentos ricos en magnesio, como los plátanos, almendras o espinacas, esenciales para reducir el estrés, y también los alimentos con hierro, como lentejas, para asegurar una adecuada oxigenación cerebral".
En conclusión, concluye Ana Luzón, cuando hagas la compra, no se trata solo de llenar el estómago, sino de alimentar al órgano que lo controla todo: tu cerebro. "Elegir alimentos ricos en grasas saludables, carbohidratos complejos, antioxidantes, proteínas de calidad y micronutrientes puede marcar la diferencia en tu bienestar físico y mental. Y recuerda siempre que una cesta de la compra inteligente es el primer paso para un cerebro sano y una vida más plena", afirma esta experta.