Un nutricionista pide aprovechar el agua al cocer la verdura de la juventud mientras dure mayo
Solo se le puede poner un 'pero': cuidado con las purinas.

La temporada del espárrago blanco se extiende en los meses de abril y mayo y dada la delicadeza de su textura, su agradable sabor y sus bondades nutricionales se convierte en una de las verduras más cotizadas de la despensa.
"Con cada uno de esos tallos blancos y suaves te estás haciendo un favor", confirma la nutricionista alemana Bettina Schmidt en el portal de noticias alemán Schwaebische.de. Y es que estos bondadosos tallos blancos, además de ser saciantes porque están compuestos de agua en un 95 por ciento de agua, contienen proteínas y fibra, vitaminas B1, B12 y C, y es fuente de ácido fólico.
Pero además, la especialista destaca el poder nutritivo del caldo resultante de su cocción. "Durante la preparación hay que tener en cuenta una cosa para que no se pierdan las vitaminas, dice Schmidt: las sustancias valiosas se disuelven en el agua durante la cocción y permanecen allí. Por eso, Schmidt recomienda reutilizar el agua, por ejemplo, como base para una sopa de espárragos".
Y aunque del espárrago solo se pueden decir cosas buenas, es necesario recordar un 'pero': tienen un contenido de purina relativamente alto que pueden elevar el ácido úrico —se forma cuando se descomponen las purinas—. y si superan un determinado nivel, pueden formarse cristales de ácido úrico y depositarse en las articulaciones.