El avance rebelde hasta Damasco cuajó por méritos propios pero, también, por el desgaste brutal de unas Fuerzas Armadas que acumulaban años de mandos débiles y adelgazamiento. La certeza de que ningún aliado exterior ayudaría fue clave.
España impulsa su industria militar con proyectos basados en la alta tecnología que refuerzan una autonomía estratégica y modernizan las Fuerzas Armadas.
También conocidos como los boinas verdes del Ejército de Tierra, han llevado a cabo misiones de alto riesgo en algunos de los escenarios más complejos y peligrosos.