El agresor, que ha sido abatido, llegó a sargento en la Marina y sirvió en Irak. Chocó su cocge contra el templo, abrió fuego y luego lo prendió en llamas.
En 2000, a sus 49 años, protagonizó una histórica portada en 'Zero', con la que comenzó una batalla pública por la igualdad. Sin embargo, acabó por colgar el uniforme por el "ostracismo" al que fue sometido.
El servicio militar obligatorio, que ha desaparecido de prácticamente todo el occidente, no sería una buena solución por diversas razones, incluso históricas. Lo que sí sería deseable es crear un voluntariado europeo cívico-militar.