"Está llegando a la adolescencia", esgrimen desde la dirección de Marineland, instalaciones cerradas desde enero que están en el blanco de las críticas de activistas y ecologistas por las condiciones de los animales que aún continúan allí: dos orcas y una docena de delfines.
Piden que se declare la zona como un santuario marino para estos animales y relacionan sus problemas con los embarcaciones con estrés por la acción humana.
Un algoritmo de inteligencia artificial descifra los sonidos de estos cetáceos para entender su comportamiento y reducir las interacciones con las embarcaciones.
Un emotivo vídeo se ha hecho viral en redes sociales: un entrenador de orcas presentó a su bebé recién nacido a una de sus compañeras marinas, y su reacción ha conmovido a miles. La orca se acercó al cristal con curiosidad y ternura, incluso expulsando aire en lo que muchos lo han interpretado como un gesto de complicidad. ¡La escena ha acumulado millones de reproducciones en las redes!
G se preparan para la llegada de la “abuela Toñi” y su manada de orcas en un año en el que destaca la reducción en las interacciones con las embarcaciones de recreo.