El temblor ha tenido lugar esta madrugada en el área de Marradi (la Toscana) y ha contado con réplicas. Ya se evalúan los edificios ante posibles daños estructurales.
"Aprecio de esta generosa participación que encarna los profundos lazos de amistad sólida y solidaridad que une entre los pueblos español y marroquí", afirma el rey Mohamed VI.
"Después de mucho pelear, tras pasar 18 horas despejando 15 metros cúbicos de tierra y piedras, hemos conseguido sacarla viva". Aún hay milagros en el desastre.
El terremoto le pilló en su palacio de Francia y tardó horas en acudir a su país, pero ahora trata de mejorar su imagen. Sobre el terreno, ahora preocupan las lluvias.
Zonas rurales poco desatendidas y sin servicios sufren ahora repetidos temblores, sobre sus edificios hechos harina, mientras Rabat cierra la puerta a la llegada de ayuda humanitaria de países como Francia o Alemania.
Más de la mitad de los 2.122 muertos registrados por el momento fueron en esas localidades de la provincia de Al Haouz, en el sur de Marrakech, donde los testimonios se repiten: pueblos destrozados y complicadas vías de ayuda.
Estas impactantes imágenes las ha recogido una cámara de seguridad en Marruecos. Once minutos pasadas las once de la noche, un temblor que no se vivía en décadas y que duró, dicen los vecinos, entre tres y cuatro minutos, con sacudidas que parecían "bombas", paralizó esta ciudad en constante ebullición.