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29 de octubre: verdad, justicia y reparación

29 de octubre: verdad, justicia y reparación

Que, un año después, el president de la Generalitat no haya asumido ninguna responsabilidad por su negligencia en la gestión de la DANA es una afrenta para las víctimas.

Varios de los familiares de las 237 víctimas de la dana muestran fotografías de los seres queridos fallecidos
Varios de los familiares de las 237 víctimas de la dana muestran fotografías de los seres queridos fallecidosEFE / Ballesteros

Hace un año, las lluvias torrenciales asolaron nuestro país, fundamentalmente Castilla La Mancha, Andalucía, y con singular virulencia, las comarcas valencianas de la Ribera Alta, L’Horta Sud, la Plana de Utiel-Requena y la Foia de Buñol-Xiva, dejando 237 personas fallecidas a su paso.

El pasado miércoles, aniversario de la tragedia, en el homenaje de Estado a las víctimas de la DANA, compartimos con ellas el dolor de su pérdida, pero también su indignación y su anhelo de justicia. Que, un año después, el president de la Generalitat no haya asumido ninguna responsabilidad por su negligencia en la gestión de la DANA es una afrenta para las víctimas. Y el apoyo del líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, le hace cómplice de su indecencia. Mazón no puede permanecer un día más al frente del gobierno valenciano.

Porque, hace un año, Valencia y su entorno vivieron una de las jornadas más amargas que podamos recordar. La pérdida de vidas humanas fue la peor de las consecuencias de una DANA que dejó también enterradas en el barro miles de proyectos de vida, 370.000 trabajadores afectados, 62.000 empresas, 80.000 viviendas, 130.000 vehículos perdidos, poblaciones asoladas. La gran cantidad de agua caída no fue evitable, pero sus gravísimas consecuencias sí habrían podido evitarse.

El Congreso de los Diputados ha puesto en marcha una Comisión de Investigación para analizar con rigor la gestión de la crisis derivada de la DANA, así como para el estudio y propuesta de medidas con el objetivo de paliar los efectos de estos fenómenos adversos en el futuro.

Es el momento de identificar las responsabilidades de las autoridades competentes, de evaluar la asignación de recursos y la información que se dio y cuándo se dio a los vecinos afectados. Debemos analizar minuciosamente los protocolos de comunicación y alerta y el uso que se hizo de ellos. Debemos ser capaces de responder a la principal pregunta que se hacen los familiares de las víctimas ¿Por qué se les avisó tan tarde?

Debemos, también, analizar el nivel de coordinación y eficiencia de los dispositivos de emergencia. Hay que revisar cuál es el estado de las infraestructuras y ver qué mejoras se pueden impulsar. Vamos a requerir toda la documentación necesaria que nos permita aproximarnos con el mayor rigor y objetividad a lo acontecido.

Vamos, por encima de todo, a dar voz a las familias de las víctimas, quienes han sufrido y sufren la pérdida de un ser querido, quienes han vivido lo que ocurrió en primera persona, quienes padecen la impotencia de no obtener una respuesta concreta y sincera de por qué se actuó con tanta negligencia y falta de humanidad, sumados a un maltrato constante desde entonces. Les debemos dar voz, les debemos una respuesta, les debemos arrojar luz.

Esta Comisión debe buscar la verdad, por encima de todo, y que tengamos un relato fiel y certero de lo que pasó y de qué falló. Vamos a centrar el trabajo, en primer lugar, en la investigación de los hechos ocurridos en la fase de la emergencia y posteriormente nos centraremos en evaluar el proceso de reconstrucción.

Debemos conocer por qué la administración competente, la Generalitat, no convocó el CECOPI hasta las 17 h., cuando ya había personas ahogadas y pueblos anegados. Es preciso determinar por qué instituciones como la Universidad de Valencia canceló sus clases, la Diputación de Valencia envió a sus trabajadores a casa, mientras la Generalitat, responsable de atender a las personas en la emergencia, no se dio por aludida. ¿Cómo es posible que se alegue falta de información cuando estaban llegando cientos de llamadas al 112 pidiendo socorro?

Y vamos a tratar de averiguar qué hizo el president de la Generalitat, Carlos Mazón, que ha actuado con opacidad y de manera errática desde el primer momento. Ha ido pasando de ocultar su agenda de ese día, a dar distintas versiones, cada cual contradiciendo la anterior, con el fin de acomodar lo relatado a los hechos que se van conociendo.

La pregunta, por encima de todo, apela al sentido común y a la conciencia. ¿Qué cosa podría estar haciendo el president que fuera más importante que ponerse al frente de la tragedia? ¿Cómo es posible que no estuviera haciendo honor a su responsabilidad, cumpliendo con su trabajo movilizando recursos y solicitando los necesarios para afrontar la tragedia?. ¿Qué hacía el president en las horas más aciagas de nuestra tierra mientras muchos valencianos morían?

Vamos a tratar de dar respuesta a todos estos interrogantes y vamos a evaluar la marcha de la reconstrucción, las ayudas que ha impulsado el Gobierno de España (16.000 M€), de los cuales se han desembolsado ya más de 8.000. Hay que hacer todo lo imposible por seguir ayudando a las familias y a los municipios afectados y hay que invertir lo que sea necesario en mejorar nuestras infraestructuras, para minimizar las consecuencias de una futura inundación.

En definitiva, vamos a tratar de averiguar lo que ocurrió, ver qué podemos mejorar y, por encima de todo y en primer lugar, escuchar a las víctimas de esta terrible tragedia, a las que debemos verdad, justicia y reparación.

Alejandro Soler es portavoz socialista en la Comisión de Investigación sobre la gestión de la crisis derivada de la DANA en el Congreso y diputado por Alicante