Entrevista con Jaume Asens, abogado de la Flotilla: "Presentaremos una querella a la Fiscalía por detención ilegal y arbitraria"
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Entrevista con Jaume Asens, abogado de la Flotilla: "Presentaremos una querella a la Fiscalía por detención ilegal y arbitraria"

Desde el asalto de Israel a la Global Sumud Flotilla, Asens no solo trabaja en la liberación de las personas detenidas, sino también atendiendo a familiares y medios. Este viernes ha podido hacer un hueco para conversar con El HuffPost por teléfono.

Jaume Asens, en Barcelona cuando partió la Global Sumud Flotilla.Mario Wurzburger/Getty Images

En cuanto el abogado y diputado en el Parlamento Europeo Jaume Asens supo que Israel había cumplido sus amenazas y había comenzado el asalto a los buques civiles de la Global Sumud Flotilla, lanzó un llamamiento urgente en redes sociales. "La inacción de los gobiernos envía un mensaje de tolerancia frente a las violaciones graves del derecho internacional, debilitando la credibilidad de España y la Unión Europea en la defensa del orden multilateral y de los derechos humanos. No se trata solo de cumplir con obligaciones jurídicas, sino de estar a la altura de la historia en un momento crítico", dijo. Desde entonces, a los días de Asens le faltan horas. Como uno de los abogados de las personas que permanecen detenidas de manera ilegal en Israel, Asens no solo trabaja en su liberación sino también atendiendo a familiares y medios de comunicación. Este viernes, ha podido hacer un hueco para conversar con El HuffPost por teléfono.

  • ¿En qué situación se encuentran las personas detenidas de manera ilegal? ¿Hay comunicación por parte de Israel para dar a conocer su estado? ¿Tienen acceso a su defensa legal?

Están incomunicadas, es decir, no pueden hacer ni recibir llamadas telefónicas, pero hoy han podido hablar ya con su asistencia letrada y los servicios consulares. Todos están bien más allá de algún pequeño incidente. El trato está siendo correcto.

  • ¿Por qué hablamos de detención ilegal?

Porque todas las personas que viajaban en la Flotilla tienen derecho a navegar por el mar Mediterráneo sin que se les detenga y se les prive de libertad. No han hecho nada constitutivo de delito. A nivel jurídico, es más preciso hablar de detención ilegal que de secuestro, que es un término más político-mediático. Si presentamos una querella, que lo haremos, será por detención arbitraria e ilegal, de hecho. El bloqueo de Gaza por parte de Israel es ilegal y, por tanto, detener a quienes llevan ayuda humanitaria para romperlo es también ilegal. La referencia está en la Corte Penal Internacional, que ya estableció que el bloqueo era ilegal porque iba contra el Convenio de Ginebra. Israel habla de la conferencia de San Remo para defender su actuación, pero es que en este caso no se aplica porque es un manual militar. El bloqueo no solo es ilegal, sino que es también un crimen de guerra, algo que también han dicho ya desde la ONU.

  • La Convención de Naciones Unidas sobre el Derecho del Mar establece las 12 millas desde la costa como aguas territoriales, pero Israel siempre ha asaltado las diferentes flotillas mucho más allá, en aguas internacionales. ¿Por qué se le permite hacerlo?

Es una buena pregunta, pero... ¿Por qué permiten que cometa un genocidio o ataque a otros países? Israel es una amenaza para el mundo. No solo desestabiliza la región, sino el mundo entero. Es el país que menos respeta las fronteras, los derechos humanos, los derechos internacionales, incluso más que Estados Unidos. A esta Flotilla la atacó primero con drones en Túnez, luego en aguas griegas... Sabemos que aparte de Rusia, el Mossad es un servicio de inteligencia que asesina gente en otros países sin juicio alguno. Israel es un Estado terrorista que comete atentados terroristas por todo el mundo. Y sí, se califica como terrorismo porque si usa drones para atacar barcos con civiles, ¿no lo haces para causar terror? ¿Por qué se les autoriza a hacerlo? La Flotilla justamente trata de denunciar esa impunidad. Lo que ha hecho la Global Sumud Flotilla es lo que tendrían que hacer los Gobiernos con sus buques militares, abrir un cordón humanitario. No es solo una obligación moral o política, sino una obligación jurídica. El Tribunal Internacional de Justicia, en la denuncia de Sudáfrica contra Israel, ha pedido unas medidas cautelares según las cuales reclama a los Estados que hagan todo lo posible para prevenir el genocidio. Pero como los Estados no hacen caso, incluso hacen lo contrario, como mantener los acuerdos comerciales y la venta o compra de armas a Israel, al final los ciudadanos son los garantes últimos del derecho internacional. Detrás de todo esto lo que se ve es el desmoronamiento de toda la arquitectura moral e institucional surgida tras el nunca más del Holocausto. Ya no vale nada, y el plan de Trump y Netanyahu, dos criminales, es la mayor evidencia.

  • Entendiendo que, según el derecho internacional, un ataque a un barco con bandera española es un ataque a España, ¿qué debería y tendría que hacer el Gobierno español en respuesta? ¿Acudir al Tribunal Internacional de Justicia?

Pueden llevar el caso a la Corte Internacional de Justicia, pero también hacer lo mismo que se ha hecho con Rusia. Las resoluciones que valieron o valen para Rusia deberían valer también para Israel. Es decir, romper relaciones de toda condición con Israel y establecer un paquete de sanciones.

  • Aunque ahora se trabaja en la liberación inmediata de las personas detenidas, ya has comentado que pensáis trabajar en una querella como la que presentasteis con Sergio Toribio, el activista detenido en el asalto del buque Handala, de la Flotilla de la Libertad.

Sí, pero en esta ocasión presentaremos la querella a la Fiscalía y no a un juzgado.

  • ¿Por qué?

Porque tras la reforma del Partido Popular respecto a la jurisdicción universal, es posible que un Juzgado nos diga que no es competente para investigar, depende del juez que te toque. Pero la Fiscalía ya ha asumido la competencia y sabemos que quiere investigar estos hechos.

  • ¿Contra quién se presentará la querella?

Será muy parecida a la que presentamos con Toribio. Preguntaremos quiénes eran los mandos y quiénes ordenaron el dispositivo para conocer las responsabilidades directas, pero desde luego el primero es Benjamin Netanyahu. Él es la autoridad máxima, el que aprueba el plan de abordaje.

  • Vivimos un momento en el que muchos países, por ausencia u otros motivos, restan credibilidad o importancia a la justicia internacional. ¿Por qué consideras importante insistir en la necesidad y la urgencia del derecho internacional, de la justicia universal?

La justicia universal es una tabla de salvación, una conquista civilizatoria a la que no podemos renunciar. Su principio es muy sencillo, y surge tras el nunca más del Holocausto; existen crímenes atroces y que repugnan a la conciencia humana que no solo afectan a las víctimas directas sino a la humanidad entera. Y entendiendo que ahí donde se cometen los crímenes no habrá investigación porque hay un régimen de impunidad, como en Israel, se crearon mecanismos para que desde otros países se pudieran investigar en representación de la humanidad. Ha habido varios intentos para laminarla, para atacarla, y por eso hay que defenderla con uñas y dientes. La justicia internacional es un mensaje de prevención, dice a los genocidas y a los dictadores que no tendrán paz absoluta, que siempre habrá un sitio donde podrán perseguirse sus crímenes. Que no haya mecanismos de justicia es una buena noticia para ellos, que entenderán que pueden hacer lo que quieran.

MOSTRAR BIOGRAFíA

Me llamó Héctor Juanatey, aunque como dice Xoan Tallón, eso no importa, todo el mundo tiene un nombre. Me gusta escribir y contar cosas. En El HuffPost escribo de política, y como política lo es todo, decirles esto es como decir todo y decir nada.

 

Sobre qué temas escribo

En El HuffPost escribo, como ya les dije, de política, que es todo. Si quisieran entrar más en detalle, les cuento: por gustar, me gusta escribir de todo aquello que me preocupa dentro y fuera de la redacción. En los últimos años, por ejemplo, he estado investigando el ascenso de la extrema derecha, una suerte de virus invisible que crece cada día más. Un crecimiento, sin embargo, que también tiene responsables, y en ellos me gusta fijarme, ya sea Elon Musk, Mark Zuckerberg o influencers de ultraderecha con cada vez más adeptos. Pero también la política es causa de la desafección de la que beben los ultras. De ahí que no haya que olvidarse nunca de temas fundamentales como la vivienda; en definitiva, de las condiciones materiales de la ciudadanía. Por ese motivo, también, y desde la cobertura que hice para Público durante el 15M en la Puerta del Sol, en Madrid, he centrado gran parte de mi trabajo en las diferentes reivindicaciones de la movilización social. Sospechen siempre de aquellos periodistas que acostumbran a agobiar con la cantinela de la objetividad. Al final, solo buscan desprestigiar el sentido mismo de la profesión.

 

Mi trayectoria

Pese a todas las advertencias, desde que me decanté por estudiar periodismo (Licenciatura y Máster en Periodismo de Investigación), a excepción de un parón en el que trabajé en discurso y comunicación política, he tenido la suerte de dedicarme a escribir. Empecé en La Voz de Galicia y, tras dejar la terruña (Galicia) y mudarme a la capital en busca de oportunidades laborales, pasé por Público, La Sexta, fui redactor fundacional de eldiario.es, y he escrito para un buen número de medios como Praza.com, la revista Luzes, Playground Magazine, La Marea, Vanity Fair o CTXT. En una ocasión estuve en el campamento de refugiados de Dajla, en el Sahara, y de allí me traje unas breves anotaciones que fueron publicadas como libro, ‘Dajla. Apuntes desde o Sahara’, editado por Praza. En otra, entrevisté a Txema Guijarro, una de las personas que trabajó en el asilo de Julian Assange y Edward Snowden, y esos diálogos se transformaron también en libro, ‘El analista. Un espía accidental en los casos Assange y Snowden’, de Libros del KO. En otro lapso de tiempo, creé junto a los cómicos Facu Díaz y Miguel Maldonado un programa de humor, La Tuerka News, porque tengan claro que sin risas nos vamos a la m*****.

 


 

Cómo contactar conmigo:

Podéis escribirme a hjuanatey@huffpost.es. Se aceptan insultos, siempre y cuando tengan cierta gracia. Estoy en X/Twitter (@hectorjuanatey), Bluesky, (@hectorjuanatey.bsky.social), Instagram (@hectorjuanatey) y TikTok (@hectorjuanatey). Lo curioso es que, en el fondo, me gustaría que desapareciera más de una de estas plataformas.

 


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