Radiografía de una vivienda cada vez más imposible: precios disparados y la emancipación juvenil, por los suelos
Cinco comunidades autónomas superan el precio de compra del 'boom' inmobiliario de 2008 y los alquileres siguen alcanzando niveles históricos. Mientras, la tasa de emancipación juvenil en España marca mínimos y se sitúa en el 15,2%.

Mucho más que un simple problema. La situación y la evolución de los precios para poder independizarse o adquirir una vivienda en España sigue siendo cada vez más complicada. La bajada de los tipos de interés del BCE y los avales públicos y programas para una primera vivienda de las administraciones no parecen ser suficientes para superar una ola que ya se ha transformado en un tsunami.
Los precios están disparados. En el caso del alquiler, una vivienda de 80 metros cuadrados en España ya se ha visto incrementada en unos 142 euros mensuales, lo que supone un 14,1% interanual. Una situación muy similar a los que buscar comprar su primera vivienda.
Las últimas cifras, pertenecientes al mes de julio, muestran una realidad que cada vez es más abrumadora. Según el Índice Inmobiliario Fotocasa, Andalucía, Baleares, Canarias, Comunidad Valenciana y Madrid han superado este mes de julio el precio máximo en compra de vivienda de segunda mano que se había alcanzado durante los años de la burbuja inmobiliaria.
Por dar varios datos: la Comunidad de Madrid supera en un 22%, Baleares en un 84%, Canarias un 47% y Andalucía en un 4% el precio máximo que se alcanzó durante el boom inmobiliario, en enero de 2007.
María Matos, directora de Estudios y portavoz de Fotocasa, explica que el precio de vivienda de segunda mano en toda España ya está "a menos del 10% de marcar máximos históricos". En las zonas que ya han superado cifras de 2007, "sus ciudadanos nunca se habían enfrentado a precios tan altos como ahora".
"La accesibilidad a la vivienda está en riesgo debido a que el esfuerzo salarial que los compradores tienen que realizar está en su punto más alto. Mientras la oferta no aumente, el tensionamiento de los precios se mantendrá. Probablemente, si el ritmo de encarecimiento se mantiene, el año que viene, toda España, alcanzará precios máximos", detalla.
Difícil comprar y el que lo hace a 'tocateja'
Es cierto que adquirir una vivienda se ha convertido en una tarea de mucho riesgo. Pero ello no se ha visto reflejado en la compra de casas durante los últimos meses. Según los últimos datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), del pasado mes de junio, la compraventa de viviendas ha crecido un 17,9%, respecto al mismo mes de 2024, hasta un total de 59.021 operaciones. Un dato que muestra 12 meses consecutivos de alzas interanuales.
Lo más llamativo de todo son el tipo de compradores que están adquiriendo muchas de estas viviendas. Según recoge el diario El País, el 34,5% de las firmas entre enero y marzo se realizaron sin necesidad de solicitar una hipoteca. O lo que es lo mismo, más de un tercio de las casas que se obtuvieron en estos meses se pagaron con el dinero por delante.
Y es que son muchas las trabas que aquellos que tienen la fortuna de poder plantearse la compra de su primera vivienda se encuentran a la hora de intentar pujar por una casa que puedan permitirse. Más allá de la preocupante subida de los precios, la yincana burocrática para conseguir una hipoteca hace que muchos de los vendedores opten por la vía rápida. Si tiene tres ofertas por su piso, dos de ellas con hipoteca y una de ellas de una persona, fondo o empresa que lo paga al contado en cuestión de días, puede optar por esa opción. Una situación en la que el pez grande se come al pequeño.
Es algo que se ve reflejado en los datos de quiénes están comprando las viviendas que salen a la venta. Según el VI Barómetro ASUFIN de hipotecas, destacó que la cifra de personas que piden el préstamo hipotecario para su primera vivienda sigue bajando, pasando del 16% al 14%.
"Estos datos confirman el problema de oferta existente, en tanto que muchos compradores que la necesitan no pueden acceder, lo que tensiona los precios con un parque de vivienda a la venta muy limitado. En paralelo, parte de la que se adquiere como inversión no sale al mercado, o lo hace para usos no habitacionales, como vivienda turística o de alquiler a corto plazo", detallaron desde Asufín en el informe.
Independizarse, una utopía
Todo efecto tiene una causa. Si el precio de la venta de viviendas se dispara, la oferta es escasa y la demanda alta, es evidente que la subida de los alquileres iba a ser inevitable. Pero las rentas no han dejado de crecer en los últimos años, hasta alcanzar niveles nunca vistos.
Esto influye de forma muy directa en la gente que no puede permitirse comprar una casa y que quiere independizarse, sobre todo, en el caso de los más jóvenes. El último Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España ha vuelto a reflejar una grave situación que cada vez va a más.
Según las cifras registradas en el segundo semestre de 2024, la tendencia sigue siendo muy negativa y aseguran que todos estos malos datos colocan a la juventud española "en un estado crítico". El último dato refleja que sólo el 15,2% de las personas jóvenes vive fuera de su hogar familiar, la peor cifra que se ha registrado en un segundo semestre desde que se comenzó a registrar en 2006.
El último Observatorio de Emancipación del Consejo de la Juventud de España también detalla que el principal problema es el precio medio del alquiler, que alcanzó un máximo histórico de 1.080 euros mensuales en los últimos seis meses del pasado año. Una cifra que obliga a los jóvenes a destinar un 92,3% del sueldo que perciben para poder vivir solos.
Un 57,9% de los que han tenido la suerte de poder emanciparse vive de alquiler. De todos ellos, casi un tercio necesita compartir piso para poder asumir los gastos. Una situación agravada por la que reclaman al Ministerio de Vivienda y Agenda Urbana la apertura de un canal activo de seguimiento de la evolución de la situación juvenil.
Sara Villodre, vicepresidenta del Consejo de la Juventud de España, explica en una conversación telefónica con El HuffPost que cada informe viene a reflejar una realidad dura: "La situación de los jóvenes no mejora". "El Observatorio lo llevamos haciendo desde 2006 y, actualmente, tenemos la tasa más baja desde que lo hacemos. Hemos vivido otros momentos de grandes crisis económicas, del covid y ahora es cuando tenemos la peor tasa, superior a los 30 años", señala.
"Aunque la tasa de paro juvenil es la más baja desde 2007, seguimos sin tener unas condiciones que nos permitan generar ese plan de vida futuro, porque es la vivienda lo que hace que sea inasumible para nosotros. El precio medio es más alto desde que tenemos registros", justifica.
Sara Villodre también habla del caso de gente que comparte vivienda "porque quiere" y aquellos que lo hacen porque "no pueden permitirse" otra opción. Y, aún así, indica que "sigue habiendo gente que necesita de la ayuda económica de su familia para poder afrontar el pago del alquiler cada mes".
"Nos han prometido que, si invertías en estudiar y hacías unas prácticas que no te pagaban, ibas a conseguir un buen trabajo para acceder a una vivienda donde tú querías y eso no ha sucedido. Hay gente que se ha ido de casa, invierte en un alquiler más caro en otra ciudad para tener un máster y luego tiene un trabajo mal pagado, que no se corresponde con su formación o, pese a tenerlo, ni siquiera puede pagarse el alquiler. Es una situación insostenible", recrimina.
La vicepresidenta del Consejo de la Juventud de España también explica que está difícil situación no sólo afecta a la gente menor de 30 años. "Hay mucha gente con 35 o 40 años, pero sigue teniendo los mismos problemas con la vivienda que cuando tenían 25 o 30 años", añade.
Mientras la grave situación de la vivienda sigue enquistándose, convirtiéndose en el principal problema para los españoles durante ocho barómetros del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) consecutivos, pasando del 22,5% de noviembre de 2024 al 30% del último estudio, del pasado mes de julio.
Las gráficas, las estadísticas y los datos no dejan de registrar cifras históricas que se convierten en una auténtica losa para todos aquellos que sueñan con independizarse, poner en marcha un plan de vida futuro o, simplemente, vivir. Muchos hablan de que dato mata relato, pero, en esta ocasión, como en muchas otras cosas, hace falta que algunos digan menos y hagan más.
